Pero eso es López Obrador, ese ha sido y ese seguirá siendo, metido hasta el tronco en el proceso electoral, violando la ley, negándolo y reiterando su retiro, del que tanto insiste que no acaba de convencer, pues es un adicto al poder
Personalidades de la comunidad cultural consideraron que las próximas elecciones del 2 de junio será una confrontación entre el autoritarismo y la democracia, en medio de “una coyuntura muy peligrosa”