
Un físico se disparó a sí mismo en una piscina para demostrar cómo la resistencia del agua impide que el proyectil pueda ir con rapidez
Andreas Wahl, un físico noruego reconocido, buscó poner a prueba las leyes de la Física. En su más reciente video, Wahl se sumergió en una piscina junto a una escopeta, la cual sería disparada por él mismo a solo tres metros de distancia.
En el video se aprecia al científico sosteniendo una cuerda amarrada al gatillo antes de dispararse. Al momento que efectúa el movimiento para que la escopeta dispare, se visualiza que el casquillo de la bala no llega a recorrer un metro.
La finalidad del video era dejar en claro que la distancia que puede recorrer una bala bajo el agua no es mucha, a diferencia de lo que en condiciones normales puede alcanzar el proyectil.
El científico explica que este fenómeno se debe a las propiedades que posee el agua. La resistencia que tiene impide que el proyectil pueda ir con la rapidez característica, terminando al fondo de la piscina.
Redacción