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Turistas de Key West pueden pasear en la limusina presidencial de Truman
Turistas suben a la Lincoln Cosmopolitan, la limusina que alguna vez usó el presidente Harry S. Truman de EE.UU. Foto de EFE

Los turistas y residentes visitantes de la Pequeña Casa Blanca Truman de Key West (Cayo Hueso), en el extremo sur de Florida, pueden ahora pasear por la isla en la limusina presidencial de la época.

La Fundación Harry S. Truman de Key West adquirió recientemente la limusina de época “Lincoln Cosmopolitan” que el trigésimo tercer presidente de EE.UU. (1884-1972) usó durante su mandato (1945-1953).

Esta limusina es una de las nueve ubicadas en diferentes ciudades de los Estados Unidos para uso del presidente cuando viaja a diferentes lugares”, explica Clinton Curry, director de operaciones de la Pequeña Casa Blanca Harry S. Truman.

La limusina, que tiene las 32 mil millas originales (51 mil 500 kilómetros) en su odómetro, cuenta con un sistema de intercomunicación, un escudo hidráulico de privacidad interior, elementos de seguridad y un controlador de flujo de aire para la comodidad del presidente.

Durante su mandato, Truman pasó casi seis meses en Key West, por un total de 175 días de su presidencia, repartidos en 11 visitas, detalla la Oficina de noticias de los Cayos de Florida.

La Pequeña Casa Blanca Harry S. Truman, único museo presidencial de Florida, fue meticulosamente restaurada a su apariencia de la época de Truman.

El museo exhibe artefactos auténticos, incluida la mesa de póquer hecha a mano por el expresidente, una camisa tropical que usó en sus paseos por Key West y el escritorio donde desempeñaba sus funciones oficiales.

Además de los recorridos regulares de la estructura pintada de blanco, el museo inauguró recientemente un recorrido exclusivo para pequeños grupos para ver de cerca la galería de objetos invaluables de Truman que no están en exhibición pública.

Al final del recorrido, los participantes pueden ponerse guantes blancos para guardar las pertenencias presidenciales, incluido su preciado medidor de whisky.

Por ello, para culminar la experiencia, los visitantes pueden concluir su experiencia “presidencial” con un paseo en la limusina que transportaba al trigésimo tercer mandatario de Estados Unidos.