Por ser parte del Reino de Dinamarca, 100 habitantes que viven aislados en Groenlandia, con temperaturas extremas durante 9 meses al año, cuentan con una infraestructura y sistema de salud de primer mundo
Con tan solo 100 habitantes, en la remota ciudad de Aappilattoq, al este de Groenlandia, los habitantes viven en casas con luz, drenaje y calefacción. Tienen juegos infantiles, postes de luz, una escuela, un cementerio y una iglesia protestante.
Hombres y mujeres que se dedican principalmente a la pesca, cuentan con un excelente servicio de salud del gobierno de Dinamarca.
Hay un consultorio médico y doctor, pero pueden ser transportados en helicóptero a otras ciudades cercanas con clínicas y hospitales. En caso de ser necesario, son trasladados en avión a Copenhague.
Los habitantes reciben con entusiasmo a los turistas, que llegan a bordo de cruceros de expediciones.
El pueblo está escondido detrás de una enorme roca roja e imponentes montañas, que hacen que sea prácticamente inaccesible por tierra.
En invierno el acceso es únicamente por trineo o helicóptero. En la iglesia el coro local da una presentación especial a los turistas que los visitan.