Una nueva terapia antirretroviral en una sola tableta recientemente aprobada en México busca mejorar la calidad de vida de personas con VIH
Mejorar la calidad de vida de los pacientes que viven con VIH, así como disminuir la toxicidad a largo plazo y favorecer la adherencia de los pacientes, son los objetivos de una nueva terapia antirretroviral en una sola tableta recientemente aprobada en México.
“Se trata de una combinación hecha de dos medicamentos (dolutegravir/lamivudina) que afectan en dos sitios diferentes a la actividad del virus de igual forma que lo hacían tres o cuatro medicamentos”, afirmó este jueves en conferencia de prensa el internista e infectólogo Marco Banda.
Este, dijo el experto, significa el primer tratamiento de dos fármacos en una sola tableta para tratar la infección por virus de inmunodeficiencia humana (VIH) aprobado en el país.
Banda recordó que este tipo de tratamientos representan una importante innovación en el manejo de este padecimiento, pues hasta ahora en ocasiones se podían usar hasta tres fármacos distintos simultáneamente, lo que incide en la calidad de vida de los pacientes.
El experto recordó que en el mundo actualmente más de 37 millones de personas viven con VIH.
Mientras que en México, 301 mil 182 personas con infección por VIH se encuentran en el registro de vigilancia epidemiológica del Centro Nacional para la Prevención del VIH y el Sida (Censida), de los cuales el 36 por ciento han fallecido y el 5 por ciento se desconoce su estatus actual.
Hoy en día, precisó Banda, el tratamiento antirretroviral ha modificado el curso de la infección por VIH hasta convertirla en una enfermedad crónica, logrando disminuir la carga viral de una persona a niveles indetectables, lo que significa que no solo una mejora en la calidad de vida, sino que reduce el riesgo de que se transmita el VIH.
Esta terapia antirretroviral con solo dos medicamentos comprobó su efectividad y seguridad en los estudios clínicos GEMINI 1 y 21, así como el TANGO2.
Sin embargo, el experto enfatizó en que “no es una cura para el VIH, sino una estrategia para eliminarlo de la sangre”.
“Pero el hecho de eliminarlo de la sangre permite que los pacientes mantengan una calidad de vida y una salud muy parecida a la que tenían antes de estar infectados”, aseveró, además de que la carga viral disminuida a niveles prácticamente indetectables reduce el riesgo de transmisión.
Jaime Andrade, internista, infectólogo y director del Hospital Civil de Guadalajara, señaló otra de las ventajas de esta terapia es que tiene menos efectos adversos que otros tratamientos antirretrovirales.
Aunado a ello, que los pacientes tengan que consumir menos fármacos ayuda a que no se sumen otras enfermedades a la infección por VIH, ya que al ser un tratamiento de por vida, muchos pacientes a los 50 años ya viven con enfermedades crónicas derivado del consumo prolongado de medicamentos.
La terapia, dirigida a mayores de 12 años que pesen al menos 40 kilogramos, es especialmente indicada para recién diagnosticados o a quienes nunca han padecido falla virológica al tratamiento antirretroviral, y busca que los pacientes tengan mayores beneficios.
Con información de EFE