¿Por qué es tan elevado el costo de un boleto de avión?

Se tiene la idea arraigada que el precio del combustible es lo que vuelve caro un viaje. Sin embargo, analizando otras variables en el vuelo, puede quedar desmitificada, nos señala el medio Gizmodo.

La idea se arraigó por algo que es muy cierto en el negocio de la aviación: los aviones consumen cifras abrumadoras de combustible, misma que debe ser cuantificada de manera distinta a la que solemos medir el consumo de gasolina en un coche. Un avión Airbus A320neo, por ejemplo, quema un galón y medio de combustible por cada milla recorrida, algo que significaría, en su respectiva equivalencia, a 350 litros cada 100 kilómetros.

Así, un trayecto de 340 kilómetros, como lo es un vuelo de Nueva York a Washington DC, se necesitaría 317 galones de combustible; es decir, mil 200 litros de queroseno. Haciendo la comparación, con este volumen de combustible uno puede llenar el depósito del coche más de veinte veces. No obstante, aquí viene una variable más a considerar: la cantidad de pasajeros; mientras en un vehículo caben cinco (o más, si van en modalidad “sardina”), en un A320 caben 154 pasajeros.

Entonces, podemos asumir que si el avión va lleno, el rendimiento de combustible por persona se vería optimizado, y equivaldrá a 104.7 millas por galón, o 2.25 litros por 100 kilómetros recorridos por pasajero. Ello significaría un número asombrosamente bajo.

En Estados Unidos, por ejemplo, las aerolíneas pagan de media 1.24 dólares por galón de combustible (22 pesos mexicanos, aproximadamente), por lo que, en nuestro ejemplo de vuelo Nueva York-Washington, con un Airbus A320neo sin ningún asiento desocupado, el combustible costaría 2.50 dólares (45 pesos mexicanos, aproximadamente) por persona en términos de energía.

No obstante, cualquier aerolínea ese trayecto tiene como mínimo 80 dólares (mil 490 pesos). ¿Por qué la razón?

Factores

Se debe considerar un primer factor que jamás tomamos en cuenta (o quizás en segundo o tercer término): la tripulación y su salario. Tomando el mismo parámetro de Estados Unidos, el salario promedio de un piloto es de 79 mil dólares anuales, equivalente a una media de 44 dólares por hora de vuelo para un máximo de mil 800 horas.

A ello se le debe sumar el sueldo del segundo piloto y el de los auxiliares de vuelo, lo que hace un total de 240 dólares por trayecto, un costo de 1.50 dólares por pasajero.

Además, la aerolínea correspondiente debe pagar al aeropuerto por la prestación de servicios (en conceptos por puertas de embarque, vehículos para la carga y descarga del equipaje, entre otros), así como por actividades de navegación (tanto derechos de despegue y aterrizaje). El aeropuerto JFK de Nueva York cobra 6.33 dólares por cada mil libras (450 kilogramos) de avión que van a despegar. En el mismo ejemplo del A320, se gastarían mil 89 dólares por el avión de 78 toneladas, a un costo repartido de 7 dólares por persona.

Impuestos. Otro gasto más. Los gobiernos federales pueden simbolizar, gracias a los gravámenes, hasta la mitad del precio del boleto, aunque varían entre países y se disparan si el vuelo es internacional en lugar de doméstico.

Y es que además del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que se pagan en algunos países, existen tasas por el uso del aeropuerto y de los servicios de seguridad, tasas para financiar la administración de la aviación civil, impuestos que gravan el petróleo, y un largo listado. Utilizando el ejemplo del vuelo Nueva York-Washington, se paga una media de 15.60 dólares de impuestos y tasas totales por pasajero.

El costo del avión. Así, antes de ponerlo a volar, la aerolínea ha tenido que comprar el avión, cosa que también se ve reflejado en el precio del boleto. El Airbus A320neo cuesta, por ejemplo, 107 millones de dólares. La vida útil de los aviones debe calcularse por ciclos de vuelo: no importan tanto las horas que pasa volando como la cantidad de veces que la cabina del avión se ha presurizado.

Cada vez que se realiza una presurización se generan microgrietas que envejecen el fuselaje. El A320neo puede realizar hasta 60 mil ciclos, o sea que para amortizar su precio hay que cobrar un extra de 1.783 dólares por vuelo, simbolizando 11.50 dólares por pasajero.

El mantenimiento del avión. Los costos de inspecciones en seguridad, mano de obra, costo de las piezas de refacción y restauración de los motores, significan estimaciones de otros 2 mil 121 dólares por vuelo, es decir, un costo repartido de 14 dólares por pasajero.

El seguro del avión. Además, se debe contemplar que las aerolíneas incluyen importantes seguros para cada vuelo y cada pasajero en el aire, que incluye un costo de 106 mil 500 dólares al año por avión, cosa que significarán 25 centavos al precio del billete.

Cálculos

Haciendo los cálculos, tenemos unos 60 dólares por pasajero para nuestro el vuelo de Nueva York a Washington DC.

• 2.50-combustible 
• 1.50-tripulación 
• 14-aeropuertos 
• 15.60-impuestos 
• 11.50-avión 
• 14-mantenimiento 
• 0.25-seguro

Así, el resto, lo que lo hace llegar al precio de 80 dólares, corresponde a las ganancias de la aerolínea.

Pero si bien puede parecer una importante ganancia, la empresa debe pagar sus instalaciones (y el mantenimiento) y el salario de los empleados (que van desde administración, publicidad, atención al cliente y personal de limpieza). Ello podría significar un aumento de 10 dólares al boleto en el vuelo. Con ello, a la aerolínea le quedan 10 dólares de beneficio.

Con información de GizModo