El nuevo dueño aseguró que utilizará la mansión como su casa aunque no descarta darle un uso institucional
Autoridades francesas confirmaron que la casa en la que Pablo Picasso murió pasará a manos del neozelandés Rayo Withanage, quien la había adquirido por 24.6 millones de dólares en octubre pasado.
El abogado de Withanage, Marc Provenzani explicó que su cliente ganó la demanda que había interpuesto por el anterior propietario quien argumentó que su cliente no había pagado tal como se acordó en la subasta.
Sin embargo, se comprobó que Withanage se retrasó en el pago del dinero y no hizo el abono en diciembre sino hasta enero.
El hombre aseguró que utilizará la mansión como una de sus residencias pero no descarta que, en un futuro, pudiera darle un uso institucional.
Con información de EFE