
Sweepee Rambo, una mezcla entre chihuahua y crestado chino de 17 años, logró imponerse ante el jurado como el perro más feo del mundo
Una mezcla entre chihuahua y crestado chino, de 17 años, ganó el concurso celebrado en California, Estados Unidos.

Un perro pequeño, ciego y arrugado recibió el premio al “Perro más feo del mundo”, en un concurso celebrado el pasado viernes en Pentaluma, California (Estados Unidos). Sweepee Rambo, una mezcla entre chihuahua y crestado chino, de 17 años de edad, logró imponerse ante el jurado.
Con sus ojos mirando cada uno en una dirección, unos pelos que le salen de la cabeza y contrastan con su piel color negro y la lengua de fuera, Sweepee Rambo es un perro realmente feo. Sin embargo, ello le valió la corona.




El concurso, como cada año, reunió a numerosos dueños de canes considerados como “feos” para un concurso diferente, y el que hizo furor también fue otro perro, mismo que quedó finalista: Himisaboo, una mezcla entre salchicha y xoloitzcuintle que, con su peinado a lo “Donald Trump”, fue uno de los más populares.
Además, sobre su cuerpo sin pelo luce una melena rubia muy al estilo del candidato presidencial republicano a la presidencia.


De acuerdo con la empresa organizadora, la cual lleva 28 años celebrándose, los criterios para elegir al perro más feo del mundo son la personalidad, la actuación y la reacción del público.
Además, ninguno de los animales puede sufrir cambios en su aspecto para la competición: recorren una alfombra roja, son presentados al público en un escenario, y un jurado designado para el evento califica a cada perro.
También presentan su perfil en Internet. “A él le encanta mi piel de bebé con pecas y mi legendario corte de pelo rubio mohicano”, señala, por ejemplo, Sweepee Rambo en alusión a su dueño, Jason Wurtz, de Encino, cerca de Los Ángeles. “Desde hace 15 años viajo con él cada día rumbo al trabajo”, agrega.
Wurtz y su perro se llevaron un premio de mil 500 dólares (28 mil pesos mexicanos, aproximadamente) y un gran trofeo.
Cabe recordar que el año pasado, el ganador de la misma competición fue Quasimodo, una mezcla de pitbull y pastor alemán que se parecía a una hiena por su lomo deformado.
Redacción