Expertos en salud de Noruega, revelaron que hacer ejercicio regularmente prolonga hasta cinco años más las esperanzas de vida.
Expertos en la salud coinciden en que comer saludablemente y hacer ejercicio mejoran notablemente la calidad de vida de las personas e incluso hasta incrementar sus esperanzas de vida, sin embargo qué tanto ejercicio y de qué tipo se tiene que realizar para empezar a notar estos cambios para alargar la vida.
De acuerdo a un estudio publicado en la revista British of Sports Medicine, realizado por especialistas del Hospital Universitario de Oslo, en Noruega, llevaron a cabo una investigación por varias décadas para determinar de qué manera el ejercicio puede darnos hasta 5 años más de vida.
Esta investigación parte de los estudios Oslo I y II, los cuales dieron seguimiento a cerca de 26 mil hombres nacidos entre 1923 y 1932, los cuales fueron sometidos dos pruebas y exámenes físicos durante los setentas y el 2000.
Además de los dos exámenes, los sujetos del estudio fueron cuestionados sobre cuánta actividad física realizaban, si era nula, leve, moderada o intensa.
Respecto a la publicación presentada este día en la British Sports Medicine, con base en los estudios noruegos previos, se analizó a 5 mil 738 participantes, de los cuales se llevaron registros por 12 años, de 2000 a 2012.
Los resultados arrojaron que realizar 30 minutos de ejercicio, al menos 6 días a la semana sin importar el nivel de intensidad, reduce hasta 40 por ciento cualquier riesgo de morir por cualquier causa.
Causando un beneficio similar si también a realizar ejercicio vigoroso por menos de una hora a la semana, además que los hombres que practicaban ejercicio moderado e intenso frecuentemente vivieron 5 años más que aquellos que tenían un estilo de vida sedentario.
Estas cifras no distan mucho de la declaración del doctor I-Min Lee, médico del Hospital de Brigham de Mujeres, en Boston, quien asegura que por cada minuto de ejercicio que se realiza, se pueden ganar hasta 7 minutos de expectativa de vida.
El doctor Lee, también citó otro estudio en el que se reveló que caminar rápido por 75 minutos a la semana también puede ayudar a prolongar la vida por casi dos años, obteniendo un resultado similar al obtenido por los investigadores de Oslo, quienes agregaron que además del ejercicio, mantener el peso adecuado pueden prolongar hasta 7 años más de vida.
De forma favorable, el comenzar a ejercitarse a cualquier edad también reduce las probabilidades de muerte. Prueba de ello, en el estudio Oslo, de los hombres analizados en los 70, aquellos que se ejercitaban y que dejaron de hacerlo en el 2000, tenían el mismo riesgo de muerte que los sedentarios.
Mientras que aquellos sedentarios de 1970, que comenzaron a hacer ejercicio en el año 2000, poseían hasta un 44 por ciento menos de riesgo de morir.
Por lo que los especialistas noruegos concluyeron que realizar cualquier actividad física con frecuencia, sin importar la edad, brindará un beneficio mayor al corazón y sobre todo para alargar el tiempo de vida de las personas.
Con información de El País.
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