Elecciones 2024
Elecciones 2024
En Jalisco 7 por ciento de la población presenta alguna clase de tic
internet

El psicólogo de la División de Medicina Interna del Hospital General de Occidente (HGO) de la Secretaría de Salud Jalisco, Jaime Orozco Ibarra, indicó que 7 por ciento de la población jalisciense presenta alguna clase de tic.

Agregó que si la persona acostumbra chuparse el dedo, jalarse el bigote y cejas, morder una pluma o un lápiz, y tartamudear al hablar, “se trata de tics provocados por trastornos mentales que pueden ser de tipo crónicos motores y fonéticos”.

Aclaró que chuparse el dedo, “dentro del desarrollo y de la etapa oral, es una manera de gratificarse ante el estrés o el medio ambiente, razón por la cual los niños lo hacen pues estimulan su encía, además como manera de explorar sabores; es parte de un desarrollo normal”.

“Cuando existe tensión, los niños chupan alguna cosa para sentir el control de la situación, cuando crecen dejan esa conducta o tic, sin embargo, adquiere otras como morderse las uñas o morder el lápiz para controlar los momentos que lo incomodan”, apuntó.

Explicó que cuando una persona se siente estresada ante alguna circunstancia puede chuparse los dedos, morderse las uñas o un lápiz o hasta tartamudear, “están clasificados como trastornos mentales porque al final de cuentas es la emoción lo que genera la conducta motora”.

Manifestó que se relaciona a trastornos de ansiedad, puesto que quienes se chupan el dedo es porque en ese momento se sienten ansiosos, nerviosos y lo hacen como un mecanismo de defensa a través del cuerpo.

“Hay que tener cuidado y no confundirlo con conductas agresivas como mofarse de la persona o señalarla, hay que entender que en ese momento el individuo está estresado por diversas circunstancias y que habrá que ver porque entra en esas situaciones”.

Dijo que la conducta de chuparse el dedo va más allá de la apariencia, ya que puede generar algunos otros problemas como es el deformar el paladar y la mandíbula, lo que dará problemas de salivación, así como de inadecuada pronunciación del lenguaje.

Expresó que al detectarse cualquier clase de tic, se debe acudir a un especialista como el psiquiatra o psicólogo, según lo requiera, “existen alteraciones emocionales que habrá que detectarlas a tiempo para evitar complicaciones futuras y cambiarlas en beneficio de la persona a través de terapias”.

Puntualizó que actualmente, “7 por ciento de la población total en Jalisco presenta alguna clase de tic, este problema se presenta de igual manera tanto en hombres como en mujeres”.

“Los tics crónicos motores tienen solución y no están relacionados con caprichos o conductas infantiles”, concluyó.

Con información de Notimex