Polos de desarrollo

La reubicación de las cadenas productivas generará otro boom económico para el norte del país. Nuevo León recibirá una de las giga factorías de Tesla —una derrama de 4,500 millones de dólares— y Chihuahua ya anuncia inversiones por más de 3,000 millones de dólares, tan sólo este año.

La vecindad con Estados Unidos es la ventaja comparativa de los estados fronterizos. Pero hay cuatro grandes industrias —autopartes, producción de vehículos ligeros, aeroespacial y dispositivos médicos— que han tenido la capacidad de desarrollarse regionalmente… en el norte y el Bajío.

¿Y el sur-sureste? A través de un decreto, el Ejecutivo federal anunció un paquete de estímulos fiscales para las empresas que se instalen en los polos de desarrollo del bienestar del Istmo de Tehuantepec.

Es la primera llamada para los inversionistas. Ahora falta que el alto mando responsable de la coordinación ejecutiva del Corredor Interoceánico deberá precisar las áreas consideradas “polos de desarrollo” del Istmo de Tehuantepec.

Ya están definidas las actividades productivas invitadas a invertir en la región: eléctrica y electrónica, semiconductores, automotriz, autopartes y equipo de transporte, dispositivos médicos, farmacéutica, agroindustria, equipos para generación y distribución de energía eléctrica, maquinaria y equipo, tecnologías de la información y comunicación, metales y petroquímicos.

El pasado lunes 5 —el mismo día que el Diario Oficial de la Federación publicó el decreto sobre los polos de desarrollo en el istmo de Tehuantepec— el Consejo de Empresas Globales divulgó un estudio sobre el nearshoring en México, cuya conclusión es áspera: México tiene una ventana de oportunidad no mayor a seis años para concretar las oportunidades de inversión.

Antes del 2030 —de acuerdo con estimaciones basadas en múltiples fuentes— la relocalización de empresas podría generar entre dos y cuatro millones de empleos adicionales; romper con el máximo histórico de inversiones extranjeras directas (35,000 millones de dólares en 2018) y llegar a 50,000 millones de dólares anuales; llevar a un crecimiento del PIB de 2.5% e incrementar la productividad laboral entre el 15 y el 30 por ciento.

¿El costo de oportunidad? Según el CEG, aprovechar la promesa del nearshoring conlleva resolver problemas complejos, cuellos de botella y deficiencias que demandan generosidad política, cooperación empresarial y altura de miras de los representantes de México, Estados Unidos y Canadá.

FRENÓN. Los avances del Tren Maya están en riesgo en el tramo 4. Desde hace dos meses, los trabajos están demorados, por un intento de despojo. El problema se remonta a la incorporación de Elizabeth Escamilla Gerónimo al esquema accionario de IMA, Especialistas en Electrificación Ferroviaria, firma subcontratada por Cotrisa-ICA para la implantación, suministro y construcción del sistema de catenaria en dicho tramo. Escamilla Gerónimo, como tenedora del 30% de las acciones de IMAEEF, ahora reclama el control de la compañía, que recibió 3,600 millones de pesos para cumplir con los trabajos en la Península de Yucatán.

INTERACTIVOS. Un grupo de niños y adolescentes, reunidos en la biblioteca pública Juan José Arreola, de Guadalajara, se enlazó con la Estación Espacial Internacional para conversar con el astronauta de origen salvadoreño Frank Rubio, quien está en órbita desde hace dos años. El conversatorio fue conducido por Ana Cristina Olvera, periodista especializada en temas científicos, y producido por la Asociación de Televisoras Educativas y Culturales Iberoamericanas.