Me propongo restituir en lo posible ambas cosas, citando textualmente lo dicho por Zedillo desde el principio, desde su salida al público el 27 de abril pasado
He oído repetida la noción de que no hay nada nuevo en lo que ha dicho el ex presidente Zedillo en los últimos días.
Creo que ha dicho muchas cosas que no había dicho y con un rigor y una oportunidad que le dan novedad a su diagnóstico sobre la situación mexicana. Nueva también es su discusión con la presidenta Claudia Sheinbaum y su petición de transparencia
El barullo de la conversación pública, junto con la especialidad gubernamental de no discutir ni explicar, sino descalificar y distraer, nubla la claridad del diagnóstico y la fuerza de la petición de transparencia del ex presidente Zedillo a la presidenta Sheinbaum.
Me propongo restituir en lo posible ambas cosas, citando textualmente lo dicho por Zedillo desde el principio, desde su salida al público el 27 de abril pasado.
En aras precisamente de la claridad, iré sólo citando sus palabras textuales, aparecidas en Nexos y Letras Libres.
Empiezo por su diagnóstico sobre el estado de nuestra democracia.
Zedillo: Mi conclusión es muy sencilla: en México se murió la democracia. En México están haciendo un Estado policial (Nexos).
Zedillo: Cuando la Presidenta nos dice que México está por convertirse en el país más democrático del mundo, tristemente nos está mintiendo a todos los mexicanos. Que no nos engañen: nuestra joven democracia ha sido asesinada (Letras libres).
Zedillo: Hablaba de regresión democrática antes de las reformas que promovieron el señor López Obrador y su partido. Ahora hablo con toda convicción del final de la democracia mexicana. Y esto no es una postura política. Podemos revisar el libro de texto y decir: ¿qué se requiere para tener una democracia? ¿Cuáles son los elementos?
Necesita usted división de poderes, necesita usted elecciones limpias, juzgadas, sancionadas, organizadas por órganos independientes; necesita usted de Estado de derecho, necesita de un Poder Judicial independiente. Chequen cada uno de estos puntos y díganme por favor si existen en México. Mi respuesta es no (Nexos).
Zedillo: ¿Cuál era la verdadera naturaleza de la transformación morenista en el poder? En los últimos meses de su gobierno y los primeros de su sucesora, Claudia Sheinbaum, el acertijo quedó diáfanamente resuelto: la transformación prometida era en realidad la de sustituir nuestra joven democracia por una tiranía (Letras Libres).