Elecciones 2024
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México, el país que bajo cualquier presidente en los últimos 20 años jamás había estado de lado de la dictadura, de la militarización, de hacer más pobres a los pobres y de dejar a un país entero al deterioro.

Uno da medallas o condecoraciones por el reconocimiento a distintas acciones o a una sola que da una especie de triunfo. Desde infancia se nos enseña la importancia de ellos y el cómo no se premia lo negativo, lo que no hace bien, lo que lastima o lo que no es honesto y sincero.

El acto de premiar y reconocer, lo tenemos todos muy claro. Entonces ¿por qué México premiaría a un personaje como Díaz Canel quien mantiene al pueblo cubano en condiciones deplorables y sin humanidad?

Ir a Cuba es viajar en el tiempo, pero no solo eso, es ver que el tiempo no avanza porque sus “líderes” políticos han decidido esconder todos los relojes y toda capacidad económica, política y social para que eso pase.

Los cubanos siguen huyendo en balsas, siguen durmiendo en casas que parecieran desmoronarse en cualquier momento, siguen sin poder avanzar y tener una oportunidad para vivir mejor. Su sistema de salud cada vez más precario, su imposición de ideología continúa, pero sin tanto empuje y mayor resistencia.

Los jóvenes que han salido a manifestarse, muchos de ellos han sido encarcelados y sentenciados a decenas de años.

Una sociedad controlada en su pensamiento, en su hambre, en sus necesidades, en sus cuentas de ahorro, en sus manifestaciones, en su vida entera, como todo régimen socialista.

Los cubanos que son tratados como personas que dependen al 100% de lo que diga su gobernante, como los médicos que ahora han estado llegando al país sin ningún tipo de especialidad y con temor de atender a algún enfermo porque no saben cómo lo han.

Una isla que no sabe sobre los derechos humanos, porque nunca les han permitido defenderlos y gritarlos. El control es tanto, que si lo hacen la cadena imaginaria en sus cabezas, se aprieta y los tira hacia su presidente de nueva cuenta.

El presidente López Obrador, quien nos representa a todos los mexicanos, invita al presidente de Cuba a Campeche, un lugar lejano y sin un fácil acceso para los ciudadanos e incluso para la prensa. Lo recibe como si usted y yo recibiéramos al “primo incómodo” por la puerta de atrás, porque sabe lo que está haciendo.

En la foto López Obrador le coloca la condecoración a Díaz Canel, como quien admira la muerte de niños inocentes por falta de un sistema de salud de calidad, como quien admira la represión en su gente, las mentiras por apropiarse del poder, por quien le quita toda posibilidad a los jóvenes de estudiar, prepararse y crecer, admirar el abuso a los derechos humanos y hacerse ciego, sordo y mudo cuando le conviene.

México ha quedado en ridículo y ha dejado a todos en preocupación. Pero que quede claro que quien condecoró la dictadura fue él, no todos nosotros.

Por eso el 26 de febrero saldremos a las calles, para evitar a toda costa que crean que los mexicanos aplaudimos y abrazamos a dictadores, como lo hizo el presidente.

El abrazo a la dictadura - 736c6dbacfaacd49e62554b8dd1cfd7096056913w-676x1024
Foto: EFE/Presidencia de Cuba