Espero que la presidenta Sheinbaum ya les ponga un alto, porque la CNTE no tiene llenadera. Va a costar y mucho, pero es necesario
LIC. YENNI ARACELY PÉREZ MARTÍNEZ,
SECRETARIA DE LA SECCIÓN 22
COORDINADORA NACIONAL DE
TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN:
Ya no la quieren pelona,
sino con trenzas.
Refrán popular
El día de ayer escuché con atención su entrevista con José Cárdenas, en Radiofórmula, y lo primero que debo decirle es que maneja usted muy bien su choro mareador; quien no conozca los antecedentes de la CNTE y las condiciones del país, le compraría sus argumentos.
Dice usted que llevan siete años sosteniendo mesas de diálogo en las Secretarías de Gobernación y de Educación, sin que les den respuesta. Primero que nada, le preguntaría que entiende la Coordinadora por diálogo, porque a todas luces, solamente significa que ustedes expongan sus demandas, sin que escuchen las razones para no poder satisfacerlas a plenitud.
En el mitin de ayer, ustedes difundieron una grabación en la cual la entonces candidata Claudia Sheinbaum les ofreció derogar la ley del ISSSTE de 1997 y de 2007. Supongamos que la oferta tuvo lugar, pero sus palabras no estaban escritas sobre piedra y no porque no deseara nuestra mandataria cumplirlas, sino porque económicamente no es posible. Y tal razonamiento se estrella contra la única respuesta que la CNTE desea escuchar.
Dijo usted que la CNTE no quiere privilegios, pues cuénteme que entiende por tal concepto. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define el privilegio como “ventaja exclusiva que goza alguien por concesión de un superior”; el hecho de que los maestros se puedan jubilar a los 58 años los hombres y 56 las mujeres es ya una gran concesión, pues el resto de los trabajadores nos podemos pensionar hasta los 65, sin importar cuántos años tengamos trabajando.
Usted afirmó que no está defendiendo los derechos de jubilación de la generación actual de maestros, sino también de los 3.5 millones de trabajadores al servicio del Estado y de las generaciones por venir. Pues más a mi favor, maestra Pérez. ¿Se han puesto a hacer los cálculos actuariales de los recursos que implica su demanda? Estoy seguro de que no, porque se darían cuenta de su insensatez. No sólo en México, sino en todo el mundo, el peso económico de las pensiones está ahogando las finanzas públicas.
También me permito recordarle que en el sexenio anterior tuvieron un incremento salarial de 47%, como ningún otro sector laboral o gremio, y ahora les ofrecen el 9.0%, mientras ustedes pretenden el 100%. Estoy totalmente de acuerdo en que México cuente con un magisterio bien pagado; sin embargo, me pregunto si ustedes corresponden a los acrecentamientos salariales con una elevación de la calidad de su desempeño profesional y su capacitación.
Lo menciono porque dentro de la reforma educativa peñista derogada por AMLO, se incluía la presentación periódica de exámenes por parte de los maestros y, en caso de salir mal calificados, debían acudir a cursos de capacitación. Ese fue uno de los puntos que más molestaron a la CNTE y ahora pueden pasar los años siendo fallos en su tarea sin que haya consecuencias. Le pregunto, maestra Yenni, ¿en qué trabajo puede desempeñarse un empleado de manera ineficiente y conservar su puesto?
En cuanto a los niños sin clases, usted dice que “hay que responsabilizar a quien no ha resuelto las demandas: el gobierno”. Vaya, vaya, ahora resulta que la culpa es de la autoridad no satisfacer exigencias imposibles. Mire, maestra Yenni, véalo con pragmatismo político: si la actual administración tuviera recursos a la mano, tan fácil como darles un aumento salarial si no del 100%, sí algo sustancioso para así sumar a la CNTE a sus aliados. No hay manera financieramente hablando de otorgarles más allá de lo ya ofrecido y si acaso un máximo del 15%.
Su compañero Ernesto Ramírez, de la sección 45-CETEG, se ofende porque la presidenta Sheinbaum no los recibió el viernes pasado. Pero no se hacen cargo de que fueron ustedes quienes rompieron la fecha acordada y exigieron entrevistarse con la mandataria otro día, que sabotearon la mañanera y se pusieron belicosos con los periodistas. Quisieron tronarle los dedos a doña Claudia y eso no se vale.
Y para poner la cereza en el helado están evaluando boicotear la elección del domingo. Mire, maestra Yenni, yo no voy a votar, pero esa es mi decisión personal; sin embargo, me rehúso a que el derecho al voto esté supeditado a las presiones de la CNTE.
En estos 45 años de lucha, dice usted que han “enfrentado a los gobiernos represores del PRI y del PAN”; lo cierto es que la CNTE siempre ha salido con una buena tajada, desde reposición de plazas, sueldos en incremento constante, potestad en la asignación de plazas y hasta derogación de exigencias profesionales.
Espero que la presidenta Sheinbaum ya les ponga un alto, porque la CNTE no tiene llenadera. Va a costar y mucho, pero es necesario.
Con la colaboración de Upa Ruiz
Nueva cuenta en X: @ruiz_upa
X: @Lmendivil2015