Las estadísticas…

Siempre es bueno conocer lo que sucede en torno a una Semana Santa, no solamente lo relacionado con la parte religiosa o el turismo, sino con las tragedias que año con año se viven en estas fechas.

Para comenzar les informo que México ocupa el nada halagador séptimo lugar en el mundo con mayor número de muertes por accidentes de tránsito.

Son 24 mil mexicanos que cada año pierden la vida en algún accidente, si lo dividimos nos damos cuenta que son 65 personas promedio que fallecen por día de esta forma, en algún accidente automovilístico.

Además existen estadísticas tan contundentes como la que los jueves, viernes y sábados por la noche se movilizan alrededor de 200 mil conductores bajo la influencia del alcohol en todo el país.

Y en todo este escenario existen dos semanas en el año en donde las estadísticas se elevan de forma alarmante, me refiero a ese número de muertes por accidentes de tránsito, y son la Semana Santa y la semana de la Navidad al Año Nuevo.

Por lo tanto, estamos en esas fechas donde debemos alertar nuestras antenas para evitar ser parte de esas nada agradables estadísticas.

En Sonora nuestra principal vía de comunicación se le conoce como la “Cuatro Carriles” de la parte sur comienza en Estación Don frontera con Sinaloa y termina en la Ciudad de Nogales.

Esta carretera que aún no es autopista como algunos nos quieren hacer creer, tiene de punta a punta una longitud de 459 kilómetros y hoy día tiene 36 desviaciones por reparaciones y por amplitud de la misma carretera. 36 desviaciones que se convierten en verdaderas trampas mortales para los automovilistas que no respetan las advertencias, claro cuando las hay.

Por todo ello, vaya desde este espacio la clásica pero efectiva recomendación, que consiste en cuatro acciones: Manejar sin prisa, no tomar el volante ni cansado, ni mucho menos tomado, y evitar manejar con el celular en la mano.

Si pones en práctica ese sencilla fórmula seguramente que regresaras a tu casa sano y salvo y con la familia completa.

Aunque Sonora tiene un comienzo trágico en estas vacaciones de Semana Santa cuando un tráiler pierde el control en Caborca y aplasta toda una familia de Sinaloa, dejando 6 muertes a su paso. Un accidente lamentable donde una vez más la imprudencia y las altas velocidades provocan las desgracias.

De ida

Urgentes los famosos y nada queridos carruseles en la carretera a Bahía de Kino, no pasa día que se presente un accidente, y lo peor, muchos de ellos dejan familias enlutadas.

La confianza en una carretera recta y en aparente buen estado hace de ella algo propicio para los accidentes. A esto debemos sumarle los jóvenes que se van a Kino y regresan amanecidos y alcoholizados causando dichas tragedias.

Es indispensable poner una patrulla a controlar los carros que por ahí circulan, marcándoles la velocidad para no caer en excesos.

Si por la víspera sacamos el día, podemos ver que la semana pasada día con día vimos fatales accidentes que dejaron a muchas familias de Sonora vestidas de negro.

Ojo, mucho ojo, esa carretera no es de alta velocidad, además sus largas y enfadosas rectas son el elemento ideal para generar sueño y dormitar.

Así que un llamado a las autoridades, es tiempo del carrusel.

De vuelta

Nada bien, sí nada bien le fue a Donald Trump con la agresión a Siria, al menos con el líder Ruso Vladimir Putin  quien su primera reacción fue cerrar la línea de comunicación directa que existía entre los mandatarios de las súper potencias.

El escenario político no es nada halagador para los Estados Unidos, pues sus enfrentamientos siguen creciendo y sus enemigos cada día son más.

Es por ello que México puede dejar de ser la obsesión del magnate norteamericano y se dé cuenta del enorme valor que tenemos como país y como frontera de 3 mil kilómetros.

No quiero decir que con esta situación Trump cambie su parecer contra nosotros, pero si estoy convencido que por lo pronto tiene cosas más importantes que atender antes de preocuparse por construir un muro.

Aserrín

Ahora resulta que Humberto Moreira quieres ser Diputado plurinominal por un partido que acaba de inventar. Se llama Partido Joven, véase nada más el cinismo, por eso los mexicanos estamos tan escépticos de los políticos.