Minuto a Minuto

Nacional ¿Quién los mandó matar?
          Pero ahora, la reacción en el gobierno de la 4-T, ha sido la de un descontrolado arrojo que, tras el pésame y el dolor, los ha llevado a presumir que nadie va a reforzar sus medidas de seguridad
Nacional Embajada de Israel en México condena asesinato de empleados de la sede diplomática en EE.UU.
"Se trata de un hecho estremecedor, ocurrido en un contexto de alarmante y creciente antisemitismo e incitación contra Israel", manifestó la Embajada
Nacional México e Italia refuerzan su alianza en la defensa del patrimonio cultural
Juan Ramón de la Fuente consideró que tanto México como Italia van ganando la batalla en la recuperación del patrimonio cultural e histórico
Deportes Toluca y América no se hacen daño en la final de ida
El juego decisivo del campeonato se jugará el próximo domingo en el estadio de Toluca, donde los Diablos suman este año ocho triunfos, dos empates, 26 goles a favor y 10 en contra
Nacional Pide AICM anticiparse ante posible bloqueo para este viernes
La CNTE ha realizado movilizaciones en distintos puntos de la Ciudad de México en días recientes

La unidad solo se da en las democracias, la uniformidad en las dictaduras.
Florestán.

CIUDAD DEL VATICANO.- Cuando la impresión era que el conclave, por sus características inéditas de 133 electores de 71 naciones, 21 de los cuales apenas habían sido creados por Francisco en diciembre y una mayoría no se había visto nunca entre sí, lo que por primera vez llevó a que les pusieran gafetes con nombre, foto, bandera y país de origen, para que al verse supieran con quiénes estaban hablando, se prolongaría más que los dos días de los celebrados en este siglo, abril de 2005 a Joseph Ratzinger y marzo de 2013, Jorge Bergoglio, pues ayer aquí los tiempos se repitieron y en la cuarta votación, la primera de la tarde, la pequeña chimenea de la capilla Sixtina anunció al mundo que ya había un nuevo obispo de Roma, eran las 18.07, y una oleada de emociones cubrió a los miles que llenaban la plaza de San Pedro, la de Pío XII, comenzaban a atestar la vía de la Conciliación y rebasaba el puente del Ángel, que cruza el Tíber.

          El momento de la fumata bianca fue confirmado por el repicar de las campanas de la Basílica de San Pedro, tañer que fue alcanzando los campanarios de todas las iglesias romanas.

          Ya habían elegido, pues, al papa 267, tras el fallecimiento de Francisco, el lunes 21 del mes pasado.

          Y entonces a esperar al elegido.

          Fue poco más de una hora después, a las 19:13, cuando se corrieron las cortinas de la ventana central de la Basílica de San Pedro acompañado de un clamor que hacía inminente el anuncio y así, en medio de una plaza, conmocionada, se asomó el cardenal protodiácono, el francés Dominique Mamberti, quien exclamó por el sonido local: ¡Habemus papam! Y enseguida: annuntio vobis gaudium magnum, ¡Habemus papam! Eminnentissimum ac reverendissimum Dominum. Dominum Roberto Franciscum Sanctae Romanae Ecclesiae Cardenalem Prevost, qui sibi nomen imposuit Leonem Decimum Quartum.

          Y de nuevo la asamblea, sin identificar al ungido, se desbordó.

          Luego sabríamos los que habíamos dicho que no sería estadunidense ni latinoamericano, que se trataba del cardenal Robert Francis Prevost, nacido en Chicago y con obra misionera y pastoral en Perú, cuya nacionalidad asumió.

          Salió al balón con todos los ornamentos, detrás de la cruz alta y mandó su primer mensaje, dejó ver que era el papa que más allá de la Iglesia, del mundo del hoy y del mañana que ya nos arrolla, será el papa que esta nueva era global necesita.

          Leyendo un texto que habría escrito tras ser elegido, pidió construir puentes de paz y de amor, recordó la valentía de su antecesor. Como sus pares en las congregaciones previas, destacó la importancia de la unidad y llamó a ser una iglesia misionera.

          El último papa agustino fue el veneciano Eugenio IV, 1421-47 y que, como el mundo, esta orden supo adecuarse a los nuevos tiempos. Lo vemos hoy, 600 años después.

Nos vemos el martes, pero en privado.