Una vez finiquitadas las reformas en México, todos los partidos ya están en la agenda electoral, ya no hay declaración ni evento desligado de ello, y así vemos cómo las hermandades generadas por el pacto se rompen y que los militantes de un partido se enfrentan por ser candidatos. En mi opinión, podemos centrar el … Continued
Una vez finiquitadas las reformas en México, todos los partidos ya están en la agenda electoral, ya no hay declaración ni evento desligado de ello, y así vemos cómo las hermandades generadas por el pacto se rompen y que los militantes de un partido se enfrentan por ser candidatos. En mi opinión, podemos centrar el análisis de los comicios del 2015 en 10 aspectos que aquí detallo:
1.- ¿Qué partido político será la primera fuerza? Específicamente, la cuestión es saber si el PRI es o no es la primera fuerza del país en las elecciones intermedias, saber si se ratifica su triunfo del 2012 o hay un castigo; en las últimas tres elecciones intermedias el votante ha castigado al partido en el gobierno; así, en 1997 el PRI pierde por primera vez la mayoría en el congreso, dos gubernaturas y el DF; en el 2003 y el 2009, gobernando el PAN, los votantes lo relegan a la segunda posición, por ello ahora es relevante la pregunta. Hasta ahora las encuestas hacen prever escenarios con el PRI ratificando su primer lugar, pero difícilmente alcanzará 42.2 por ciento necesario para la mayoría absoluta.
2.- Elecciones a gobernador, son nueve y serán otro foco de atención en el reparto del poder; de los nueve estados, en seis actualmente gobierna el PRI, en dos el PAN y en una el PRD. El foco podemos ponerlo en Nuevo León, por su importancia económica, y Michoacán, por el tema de la seguridad.
3.- Elecciones intermedias estatales, son ocho y en ellas no se elige gobernador, pero imposible pasar por alto la importancia de municipios y congresos estatales, específicamente en el DF, en el Estado de México y en Jalisco.
4.- MORENA, ¿hasta donde llegará? De los tres partidos nuevos el que más interés centrará es éste porque en él se concentrarán los simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador, nadie duda de que mantendrá el registro y que su presencia rompe los equilibrios tradicionales en varias zonas del país. Si en su primera aparición logra pelear con fuerza el tercer lugar, seguramente su crecimiento será rápido. Para lograrlo irá por votos a regiones donde hay elecciones locales como DF, Edomex, Tabasco, Guerrero, Michoacán, Chiapas, Morelos, entre otras, votos que pueden venir de todos los partidos, pero particularmente de los que alguna vez conformaron la alianza de izquierda PRD, PT y MC, lo que pone en peligro registros y triunfos.
5.- ¿cuantos partidos desaparecerán? Con el registro condicionado otorgado a tres nuevos partidos, las candidaturas independientes y la regla que sólo permite candidaturas comunes, en las boletas en el 2015 veremos la mayor cantidad de recuadros para que vote el ciudadano. Mi estimación personal es que en el 2015 están en peligro de desaparecer tres partidos, y hasta cuatro, si Morena concentra mucho del voto de izquierda.
6.- Tasa de participación. De 1994 al 2006 se observaron tasas decrecientes de participación, al grado que en el 2003 se generó un punto de atención, al alcanzar solamente 42 por ciento, por primera vez abajo de la mitad de ciudadanos en posibilidad de hacerlo. En el 2009 y el 2012 se rompió esa tendencia, por lo que ahora un punto a analizar posterior a la elección será la participación. Si se supera 45 por ciento del 2009, el INE habrá pasado la prueba y si alcanza 50 por ciento logrará aplausos. En mi opinión, es muy probable alcanzar 50 por ciento, por la depuración del padrón que se hizo y la presencia de más partidos políticos, por no decir del caso de las probables consultas.
7.- Nueva ley electoral. Este año desapareció el Cofipe y aparece el Legipe (Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales), que cambia radicalmente la forma de hacer y fiscalizar las campañas, así que esta ley y los jugadores estarán a prueba en el 2015, una nueva legislación que ellos mismos aprobaron. No tendrán pretexto para después quejarse.
8.- Las candidaturas independientes. Durante años, un grupo de ciudadanos pugnamos porque se abriera la posibilidad de competir en las elecciones por fuera de los partidos políticos y, aunque la ley aprobada no es la ideal, en el 2015 se abre esa posibilidad, así que veremos el resultado de los esfuerzos por obtener el registro de candidato y seremos testigos de la forma en la que se puede hacer campaña con las restricciones que impone la ley y la reacción del votante ante esta nueva figura.
9.- Las consultas. Aunque será la corte la que determine si habrá consultas paralelas a las elecciones, los temas que plantean los partidos seguramente estarán en la agenda de las campañas; así, el PRD insistirá en que la elección es también una forma de posicionarse ante la reforma energética; el PAN peleará por ponerse la bandera del incremento al salario mínimo y el PRI la idea de desaparecer a los plurinominales. Si alguna de las propuestas llega a ser consulta, el partido que la propone puede verse beneficiado y, aunque no lo sean, tratarán de usar el tema.
10.- Las encuestas. En el 2012, a pesar de que todas las encuestadoras plantearon escenarios que resultaron ciertos, no sólo en el ganador sino en el orden en que aparecieron todos los candidatos, se presentaron quejas ante el tribunal electoral por no haber “pronosticado” (SIC) la distancia con la que el ganador lo haría, y ese cuestionamiento aún es utilizado por algunos para descalificarlas. El gremio sabe perfectamente que el problema estuvo en la forma de comunicarlas ; sin embargo, las encuestas estarán de nuevo presentes y seguramente los perdedores las acusarán de su derrota, así que los encuestadores no deberemos dejarnos presionar y reportar el resultado de cada ejercicio como siempre se ha hecho.