La salida del “otro yo” de miles de mexicanos (tan hospitalarios, guadalupanos, bullangueros y solidarios) desatada por justa madre de todos los gazolinazos, me corrobora la erudita inteligencia del querido y legendario Manuel El Meme Garza cuando, al comentarle algo que hasta entonces yo daba por cierto, me dio una lección de posgrado: “¡Desde luego … Continued
La salida del “otro yo” de miles de mexicanos (tan hospitalarios, guadalupanos, bullangueros y solidarios) desatada por justa madre de todos los gazolinazos, me corrobora la erudita inteligencia del querido y legendario Manuel El Meme Garza cuando, al comentarle algo que hasta entonces yo daba por cierto, me dio una lección de posgrado:
“¡Desde luego que no!”
Me recomendó: “Jamás repitas esa pendejada!”, y me hizo ver que “si los pueblos tuvieran el gobierno que se merecen, Carlitos, los gobiernos… ¡serían peores!”.
Quienes gimotean por el alza en las gasolinas (Magna 14.2 y Premium 20.1 por ciento) y el diésel (16.5) olvidan o ignoran que durante 2010, 2011, 2012 y 2013 los mismos combustibles subieron más o menos 12 por ciento ¡cada año! (de a poquito mes a mes), y la inflación promedió menos de 3.5 en esos años (en 1987, con el Estado que añoran los chillones de ahora, llegó a 159.17 por ciento).
Suponer “ciudadana” la protesta de rebaños populistas y delincuenciales es tan ingenuo como creer la tontería de que los pueblos tienen los gobiernos que merecen.