Una ingeniera civil recomendó que la infraestructura de drenaje o servicio hidráulico se realice con material flexible por el desplazamiento
Carolina Rojas, ingeniera civil de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura del Instituto Politécnico Nacional (IPN), indicó que en la colonia Del Mar en Tláhuac el terreno es de relleno y debajo había grietas, por lo que el efecto del sismo del pasado 19 de septiembre vuelve a aflorar las grietas y en los próximos años prevé desplazamientos de milímetros que al paso de los años serán centímetros, pero no colapsará.
“Los hundimientos se manejan a cinco, 10 o 20 años, este fenómeno si se vuelve a generar es en cinco años, probablemente se va a ir desplazando milímetros y milímetros y en cinco años vamos a notar centímetros, no es un hundimiento, en ningún momento el suelo va a colapsar”, explicó.
Agregó que una característica de este suelo “es que no son minas, ese fenómeno que esta asustando a la gente de que se va a abrir el suelo es muy común cuando tenemos minas y estas no fueron atendidas para volverse a rellenar, este no es el caso”.
La ingeniera civil recomendó que la infraestructura de drenaje o servicio hidráulico se realice con material flexible por el desplazamiento que viene.
“Se puede quitar lo que sobra de material, se tendría que tomar en cuenta sobre las instalaciones, las sanitarias y de agua potable, si ya tenemos fractura buscar un elemento flexible que en el momento la grieta no se rompa, si ponemos tubería rígida se va a cortar, no importa que el desplazamiento sea mínimo, se va a cortar, hay mucha tecnología en la ingeniería que me puede ayudar a crear una unión flexible en puntos que más me afectan”, detalló.
Con información de Quadratín