Es decir, el presidente denuncia que Díaz de León aprobó unos créditos autorizados antes de que él llegara a Bancomext, lo que el ahora acusado niega
Si la gente sueña, es que está dormida. Hay que despertarla.
Florestán.
El presidente López Obrador sumó ayer su cuarta mañanera consecutiva contra el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, del que anunció, el viernes, que no lo propondría para un segundo período en diciembre próximo que termina el actual.
El conflicto lo inició el miércoles, cuando se quejó de que el Banco de México no entregaría a su gobierno los remanentes cambiarios, como anunció desde abril y que él había dado por ingresados. A las anteriores administraciones sí les aportaba, reclamó.
El jueves, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, me dijo que el fondo no eran los remanentes sino el nuevo modo de calcularlos.
El viernes, después de criticar la autonomía del Banco de México, López Obrador anunció que buscaría un nuevo gobernador muy partidario de la economía moral.
Y ayer lunes acusó al que está ahora de gobernador del Banco de México, que fue el que aprobó –dijo textualmente- el crédito para las plantas de fertilizantes (a Alonso Ancira) y ahora tenemos una deuda por esa operación de mil millones de dólares, lo que le impide ocupar ese cargo.
Sobre esto, recupero lo que Díaz de León, que no ha hecho comentario alguno, declaró el pasado 26 de agosto a otra acusación presidencial: Los créditos a los que se hace mención fueron aprobados por los órganos de gobierno de Bancomext en octubre de 2015. Yo ingresé al banco en noviembre de ese año. Esos créditos fueron aprobados previamente a mi llegada a Bancomext.
Es decir, el presidente denuncia que Díaz de León aprobó unos créditos autorizados antes de que él llegara a Bancomext, lo que el ahora acusado niega
¿No lo sabía o sí y lo olvidó?
Porque ya se lo había dicho el recién ejecutado en el patíbulo presidencial.
RETALES
1. REPRESENTANTES.- No entiendo, o sí, el retraso de Morena para registrar a sus representantes de casilla. Forma parte de la estrategia de denunciar fraude electoral en donde pierda. Es imposible que el fraude lo cometa la oposición cuando el poder lo tiene el Estado, como siempre denunciaron quienes hoy son gobierno;
2. INSTRUMENTO.- El presidente López Obrador ha hecho de las mañaneras, su principal herramienta de gobierno, todo se decide, anuncia, juzga y ejecuta en ese patíbulo del salón Tesorería. Al día de ayer sumaba 614, que con una duración promedio de dos horas, suman mil 228, equivalentes de 51 días con 16 horas de su gobierno; y
3. AEROLÍNEAS.- Ayer le preguntaron al presidente sobre la baja en la calificación aérea de México, y la respuesta confirma que no tiene ni idea de qué se trata. Se fue culpando a las aerolíneas estadunidenses y dijo que no afectaba a las mexicanas porque la mayoría de sus vuelos son nacionales, olvidando sus rutas al exterior al igual que a las compañías aéreas extranjeras que vuelan a México.
Nos vemos mañana, pero en privado.
Minuto a minuto
