
Las clases se impartirán en un área nueva que se construyó siguiendo el estilo arquitectónico neoclásico del edificio original
Mineral de Pozos es una localidad de Guanajuato, muy cerca de San Miguel de Allende, que tuvo un importante auge minero durante el siglo 19, pero en los primeros años del siglo 20 fue abandonada dos veces por sus habitantes, convirtiéndose en, prácticamente, un “pueblo fantasma”.

Sin embargo, en 2012, un grupo de inversionistas, ejidatarios, funcionarios de gobierno y operadores turísticos lograron que Mineral de Pozos se convirtiera en un Pueblo Mágico, gracias a que cuenta con diversos atractivos, como restos de construcciones jesuitas y mineras que forman un paisaje especial y único en el país.
Durante sus años de bonanza, en este lugar hubo tiendas de lujo, residencias y hasta recibió un nuevo sistema educativo que, aunque tuvo su consolidación después de la Revolución, durante el Porfiriato vivió sus primeros intentos en México: la educación pública.
La Escuela Modelo
Fue así que, por allá del año 1900, se inauguró aquí un nuevo concepto denominado Escuela Modelo, el cual era un modelo educativo, innovador para su época, que pretendía brindar educación a los habitantes de Mineral de Pozos, además de capacitarlos en diferentes oficios útiles para el desarrollo de la región. La idea era, precisamente, servir de modelo de cómo debía ser la educación en México.

Sin embargo, después de capítulos históricos como la Revolución, la Guerra Cristera y las crisis subsecuentes, la escuela fue abandonada junto con el resto del pueblo.
El rescate
Hoy, unas ocho décadas después, urbanistas, antropólogos y especialistas del INAH, junto con otras instituciones de capital público y privado, trabajaron en el rescate de esta escuela respetando su diseño arquitectónico original y ampliándola para poder continuar con parte de su objetivo original.

Con una inversión de más de 55 millones de pesos, hace unos días se inauguró en ese lugar el Centro de Arte y Prácticas Artísticas “Escuela Modelo”, en el cual se impartirán clases de pintura, grabado, cerámica, carpintería y hasta fotografía, cine y animación digital.
Cuenta con una biblioteca, una cineteca y un albergue para recibir a catedráticos, conferencistas y alumnos que pretenden traer de otro lugares del país y del mundo.

Las clases se impartirán en un área nueva que se construyó siguiendo el estilo arquitectónico neoclásico del edificio original, el cual se habilitó como museo que recrea aulas y otras áreas tal como lucían a principios del siglo 20, además de un breve recorrido por la historia de Mineral de Pozos e instalaciones como auditorio y aulas.
El objetivo es apoyar a los habitantes de esta entidad de Guanajuato, pero también detonar el turismo y actividades como la artesanía. También se impartirán materias y talleres sueltos con valor curricular, capacitaciones y posgrados.

Asimismo, se busca que ayude a impulsar la economía local y que termine con la imagen de Pueblo Fantasma que tiene Mineral de Pozos, aunque esto último es todavía parte de su encanto.
Por Carlos Tomasini