De julio a septiembre bajarán casos de COVID-19; en octubre podría haber nuevo repunte: López-Gatell

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, advirtió que se cumplió el primer pronóstico hecho por autoridades sobre el avance del coronavirus COVID-19, mismo que señalaba que la pandemia iba a ser esencialmente larga.

“La dinámica que estamos teniendo es tal como habíamos previsto: una epidemia que no es una sola, sino que hay múltiples epidemias. Hay una en el Valle de México, hay otra en el Valle de Toluca, hay otra en Culiacán, Cancún, Mexicali, etcétera”, señaló el subsecretario en entrevista para Joaquín López-Dóriga en Grupo Fórmula.

Señaló que México vive una fase ascendente durante junio, donde se va a presentar el pico epidémico.

Advirtió que dicho pico epidémico de la curva no es de un solo día, sino que puede durar semanas, donde a partir de julio comenzará el descenso de casos.

“Quiero aquí reiterar que, para las personas que tienen la expectativa que el pico es un día máximo, no es así. Al ser una epidemia larga, durante varios días consecutivos, puede ser incluso un par de semanas o hasta tres semanas, tenemos una cantidad comparable de casos diarios de hospitalizaciones diarias y de defunciones diarias, que eventualmente, cerca del mes de julio, el séptimo mes del año, comenzarán a descender progresivamente, pero no de un día para otro, desafortunadamente”, explicó.

Agregó que de julio a septiembre u octubre comenzarán a descender progresivamente los casos de COVID-19.

“Lentamente irán descendiendo todavía siendo muchos casos, hospitalizaciones y muertes al principio, hasta el mes de septiembre y finalmente hasta el mes de octubre, donde la expectativa es que Guadalajara, especialmente todo el estado de Jalisco, y Monterrey, y en general el estado de Nuevo León, serán los últimos en reducir su número de casos diarios”, señaló.

Rebrote vs segunda oleada

Ante los dichos del presidente López Obrador, quien refirió que no hay un riesgo de rebrote de COVID-19, el subsecretario López-Gatell reveló:

“Hay varios elementos a considerar. Uno es el riesgo de rebrote, y a esto voy a mencionar un par de cosas que ayuden a que aquellas que les ha inquietado la idea de rebrote como una posible contradicción de hablar de rebrotes en medio de una epidemia que aún está activa. Hay dos fenómenos a considerar: un asegunda oleada y es que, terminando en octubre, cuando ya esta primera oleada que comenzó el 28 de febrero se resuelva, es que tengamos un nuevo repunte en octubre”, argumentó.

Recalcó que la proyección de repunte en octubre es una expectativa que se tiene en todos los países del hemisferio norte, en la que existe una importante inclinación a pensar que, en conjunto con la influenza, puede haber una segunda oleada.

El rebrote, en cambio, es un fenómeno que ya se ve en algunos estados, aunque con una respuesta positiva e inmediata.

Al señalar el ejemplo de Tabasco, que tuvo una curva epidémica en abril, obtuvo un rebrote durante mayo, principalmente en Villahermosa, donde cambió la trayectoria de la epidemia, comenzó a subir y que hoy tiene una epidemia muy activa.

“A eso nos referimos con los rebrotes”, dejó en claro.

“Este fenómeno puede ocurrir en la medida en que se empiece a recuperar la movilidad en el espacio público. Definitivamente puede ocurrir”, destacó.

Nueva Normalidad y posible rebrote

Ante el anuncio del Gobierno de la Ciudad de México, donde la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, anunciara que se ha controlado el control de la pandemia en la capital,  y habrá una transición donde se declarará a la ciudad en semáforo de riesgo naranja, el subsecretario de Salud mencionó que aunque no tuvo oportunidad de escuchar la conferencia de prensa, la frecuente comunicación con ella le permite afirma que la realidad social en la capital puede dar cabida “a la recuperación del bienestar social”  sin descuidar las medidas de control epidémico.

“No olvidar que además del interés de controlar la epidemia, y por supuesto esa es la prioridad, proteger la salud y salvar la vida, tenemos el otro enorme elemento”, de la situación económica afectada por la crisis sanitaria, afirmó el subsecretario.

Señaló López-Gatell que así, la Sana Distancia, que calificó como un recurso muy útil y ha sido utilizado en anteriores epidemias, pero “tiene un costo muy importante en términos de las consecuencias para la vida social, y esa vida social incluye la capacidad de sustentar las sociedades, incluyendo la producción de alimentos o la capacidad de riqueza”.

“Tiene limitaciones sobre durante cuánto tiempo se puede mantener la intervención (Sana Distancia), con un nivel de restricción suficientemente fuerte, que es útil para reducir el número de contagios, pero que causa estragos (…) llegaría a un punto en el que tiene que empezarse a descomprimir, desconfinar, y permitir que la sociedad comience a recuperar actividades, desde luego, siempre pensando que sea de una manera progresiva, ordenada, controlada, para que no haya un desfogue que nos lleve a un rebrote”, señaló.

“Pero, lo que se refiere la doctora Sheinbaum, y lo puedo decir con tranquilidad, y sé que a eso se refiere, es que a la Ciudad de México, la realidad social, ya requiere un ajuste respecto a lo que uno desea en términos del control epidémico también para dar cabida a la recuperación  del bienestar social. Y no solo en la Ciudad de México”, expresó.

Otros estados también pueden cambiar de color en el Semáforo de Riesgo

El subsecretario de Salud señaló, que, además de la Ciudad deMéxico, otros estados también pueden tener un desfogue de las actividades, siempre manteniendo las medidas de control epidémico.

“Esto hoy por la noche lo comentaré respecto a otros estados con los que hemos estado en conversación”, señaló el funcionario.

Destacó las entidades de Baja California Sur, Quintana Roo, Yucatán, Hidalgo, Querétaro, “y es una situación muy semejante, donde estamos buscando las alternativas para recalibrar el balance entre dos bienes públicos a tutelar: la salud y la vida y el bienestar social y la economía”.

Anticipó que hay una calificación del Semáforo de Riesgo de COVID-19 que ha sido presentada con los gobernadores a través de la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO), y, tras sus intervenciones, el criterio del Gobierno de México sufrirá modificaciones para dar paso a una reactivación económica y social.

“Vimos que nuestro criterio original tenía un componente muy restrictivo que le restaba riqueza al semáforo. El componente era un punto donde cada uno de los cuatro indicadores puede variar en los colores verde a rojo; pero, al final, por diseño, imponíamos que, en cualquiera de los casos, en el color más alto era el que primaba para el resultado del semáforo en cada uno de los estados”, señaló.

Expresó que ese criterio hacía perder de vista realidades como la distribución al interior del estado de la epidemia,  donde también es heterogénea, y, luego de que varios gobiernos le hicieron ver ese señalamiento, fue que se quitó ese criterio de diseño y se mantuvo el criterio original del Semáforo de Riesgo de COVID-19, que se basa en la calificación numérica sobre la tendencia de hospitalización, la tendencia de ocurrencia de casos, el porcentaje de ocupación hospitalaria y el porcentaje de casos confirmados.

“Ya con esta calificación hay varios estados que cambian de color; ya no va a estar todo rojo. No le adelanto los detalles para no frustrarle el señalamiento. Lo presentaré en la noche, pero sí le puedo anticipar que ya no va a ser como una versión que se filtró y que definitivamente no es la autorizada”, concluyó.

Pruebas coordinadas, no indiscriminadas

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud mantuvo su posición sobre el no hacer pruebas masivas.

“No, definitivamente no estoy convencido y lo reitero”, señaló.

Afirmó que este viernes algunos titulares en periódicos destacaron “una falsedad” de la idea de que en la Ciudad de México hay “un rompimiento” con respecto del Gobierno de México sobre la aplicación de pruebas.

“El nuevo programa que ha anunciado la doctora Sheinbaum el pasado martes, es un programa muy creativo, muy bien integrado, en donde se tiene un acercamiento comunitario para la detección temprana de casos para la contención, a partir de brotes, para el manejo de la salud, para el monitoreo de personas enfermas con oximetría”, señaló el funcionario.

Afirmó que el programa de la Ciudad de México se está manejando con apoyo del Gobierno de México, razón que hace que no haya discrepancia alguna.

“Ellos no pretenden realizar pruebas masivas en forma irracional. Eso nadie en el mundo lo propone, excepto quien pudiera quizá tener un interés económico en vender las pruebas, pero no lo propone así la OMS”, afirmó López-Gatell Ramírez.

Respecto a las pruebas, señaló que ninguna autoridad en el mundo piensa hacer pruebas indiscriminadas, sino que el enfoque piensa es el uso racional de pruebas para tomar decisiones con base en el resultado de esas pruebas, y dichas decisiones serán fundamentalmente orientadas a interferir con el fenómeno de transmisión del virus.

“Detrás de cada número hay un ser humano”: López-Gatell sobre reajustes en muertes

Sobre los reajustes que la autoridad sanitaria realiza sobre el número de muertos diarios por COVID-19 en México, con jornadas (principalmente el martes) con altas cifras de incidencia en ese rubro, el Dr. López-Gatell señaló que a la autoridad le duele cada una de las muertes por la epidemia.

“Cuando hacemos estadística de un fenómeno de salud que incluye además casos fatales, defunciones, siempre nos interesa mucho recordar que una cosa es el propósito técnico de la vigilancia epidemiológica y el monitoreo del fenómeno de la epidemia en la sociedad, pero otra muy distinta es del significado humano de todas, absolutamente todas las defunciones”, afirmó.

“Nunca debemos de perder de vista, aunque hablemos de muchos números, y pongamos tablas y gráficas y curvas, que detrás de cada número hay, o desafortunadamente dejó de haber un ser humano, un ser viviente, una familia que se queda con un vacío permanente. Nos duele y debemos siempre honrar con todo respeto a estas personas y a estas familias”, explicó.

López-Gatell rechazó que haya ‘una prisa’ o ‘distancia’ en sus estadísticas, y aseguró que la autoridad siempre tiene en mente “hacer un alto en el camino” para recordar y honrar a las víctimas.

Señaló que por ser un fenómeno que afecta a la salud y la vida, los seres humanos tenemos “una capacidad límite de controlar los eventos”.

“Es natural y yo creo que comprensible, legítimo, que ciertos miembros de la sociedad tengan la idea de ‘¿por qué no se controló la epidemia, por qué no se evitó la muerte?'”, afirmó.

Expresó, en el sentido de responsabilizar al Gobierno por los casos y muertes por el coronavirus, que, desde el punto de vista científico, “obviamente carece de sentido un señalamiento así”, porque no es un fenómeno creado por el ser humano, pero que la autoridad de salud, en México y en el mundo hacen todo lo que está en sus manos, en términos de recursos técnicos, de conocimiento, prácticos, con el único propósito de lograr que esto se acabe lo más pronto posible.

“Pero no es posible y sería una mentira decirle a la sociedad, o impulsar este ánimo, que aunque legítimo, tiene cierto grado de falta de realidad de que la epidemia se puede cancelar”, señaló.

Médicos cubanos, operación de vinculación de la Ciudad de México

Ante los cuestionamientos sobre la presencia de médicos cubanos para atender la crisis por COVID-19 en México, el Dr. Hugo López-Gatell afirmó que no conoce en realidad los detalles la situación de dicho personal en nuestro país, pero su presencia es una operación de vinculación internacional del Gobierno de la Ciudad de México.

“La Ciudad de México tiene sus propios mecanismos de vinculación internacional. Obviamente, como en todos los casos, tienen que ser aprobados por la Secretaría de Relaciones Exteriores para su beneplácito, pero es una iniciativa de la Ciudad de México y el propósito, en su momento, fue el reforzar la capacidad de respuesta, no solamente en la parte médica, sino también en parte de atención a la salud pública para COVID-19”, señaló.

“La Ciudad de México identificó que podía acudir a recursos que, de manera ordinaria, para los Programas de Salud, se financian desde la Federación, igual que para las otras entidades federativas, fue donde el INSABI, que tomó las responsabilidades y atribuciones del antiguo Seguro Popular, tienen la capacidad de hacer las transferencias   para programas de salud que se administran, se regulan y se diseñan para cada entidad federativa”, expresó.

“No sé exactamente cuántos son, cuántos se les paga y  las actividades específicas que hacen”, agrega, señalando que la secretaria de Salud capitalina, Oliva López Arellano, puede tener más información.

Con información de López-Dóriga Digital