El organismo indicó que las familias demandan la verdad en el Caso Ayotzinapa, pero que se sustente en evidencia y en nuevas acusaciones y no solo en narrativa
El Centro de Derechos Humanos, Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), indicó que todavía hay pendientes sobre la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural ‘Isidro Burgos’, conocido como Caso Ayotzinapa, que lleven al esclarecimiento de los hechos y la localización de los estudiantes.
El organismo indicó que las familias demandan la verdad, pero que se sustente en evidencia y en nuevas acusaciones y no solo en narrativa.
Agregó que incluso el presidente López Obrador reconoció que su compromiso con las familias de los estudiantes de Ayotzinapa “está incumplido”.
De acuerdo con el Centro Prodh aún se mantienen pendientes las averiguaciones a las autoridades de la Administración pasada quienes decidieron cerrar el caso con la verdad histórica.
Sobre los rezagos que ha tenido el caso, detalló que la Fiscalía ha desatendido la crisis de desapariciones, ignorando sus obligaciones, sin siquiera tener listas las herramientas que debería tener desde 2017.
Este viernes, la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración, de la Secretaría de Gobernación (Segob) ofreció una conferencia de prensa para dar a conocer los avances en la investigación del Caso Ayotzinapa, a siete años de la desaparición de los 43 normalistas de la escuela Isidro Burgos.
Aseguró que desde la instalación de la Comisión presidencial del caso en enero de 2019, han seguido una metodología específica para obtener evaluaciones puntuales.
Encinas indicó que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió una carta al primer ministro israelí, Naftalí Bennett, para solicitar apoyo en la extradición de Tomás Zerón, quien fue detenido por su presunta responsabilidad den el delito de tortura contra uno de los presuntos operadores y sicario de Guerreros Unidos, Felipe Rodríguez Salgado, El Cepillo.
Por su parte, el fiscal especial para el Caso Ayotzinapa, Omar Gómez Trejo, detalló que los restos óseos de los normalistas que fueron localizados en Cocula no tienen marcas de fuego, sino, únicamente, por estar más de seis años a la intemperie lo que provocó que varios de ellos ya no puedan ser analizados.
Con información de López-Dóriga Digital