La propiedad está ubicada en lo profundo de un bosque en el lago Ritsa en Abjasia, una región autónoma de Georgia
Imágenes de la casa de verano del exlíder de la Unión Soviética, Joseph Stalin, muestran el espacio en donde se escondía del público mientras estaba de vacaciones.
La propiedad está ubicada en lo profundo de un bosque en el lago Ritsa en Abjasia, una región autónoma de Georgia, lo que la hacía difícil de encontrar.
Construida en 1947, la casa de vacaciones o ‘dacha’, como se conoce en ruso, fue el hogar del dictador comunista y su familia durante los meses de verano.
Con la compra de esta casa de vacaciones, Stalin aseguró un lugar para escapar y relajarse, escondido de los lugares donde sus brutales crímenes fueron cometidos.
El dirigente de la Unión Soviética tenía cinco casas para vacacionar que frecuentaba regularmente, pero según informes, no le decía a los funcionarios en cuál iba a quedarse, aunque las cinco siempre estaban preparadas para su visita.
Mientras que su favorita era una villa en Gagra, Abjasia, que daba al Mar Negro, a menudo frecuentaba los otros cuatro también, incluyendo uno cerca de Sochi.
Una prueba de la renombrada paranoia de Stalin, es esta casa del Lago Ritsa, la cual está rodeada de espesos árboles y está pintada de verde para ser prácticamente invisible desde el aire.
La fotógrafa Ioanna Sakellaraki, de 26 años, captó las imágenes de esta casa de vacaciones durante sus viajes alrededor de la poco conocida región de Abjasia.
Ioanna dijo: “Esa conspiración es un tributo a la paranoia de Stalin. Sólo hay una manera de llegar aquí, y es por una carretera en la montaña que serpentea por el espeso bosque”.
“Es interesante que Stalin nunca dijera exactamente en cuál de las muchas dachas iba a permanecer, así que las cinco estarían preparadas para su estancia”, agregó.
La casa está diseñada de manera modesta a pesar de que cuenta con una biblioteca y una sala de juegos equipada con una mesa de billar. Afortunadamente para los visitantes de la casa histórica, muchos de los accesorios originales todavía están en su lugar y han sido bien mantenidos por el gobierno de Abjasia.
“En la dacha puedes ver los interiores y los muebles de aquellos tiempos. Cuenta con salas de recepción, tres dormitorios, biblioteca enorme, y una casa separada para la protección, que constaba de 300 personas”, dijo la fotógrafa.
La ubicación de la dacha de Stalin en el lago Ritsa era un lugar de vacaciones popular y fue visitado regularmente por las élites dentro del régimen de Stalin. La dacha sigue siendo uno de los últimos legados positivos restantes dejados por el líder soviético.
Con información de Daily Mail