
Los rescatistas identificaron un cráter de un metro de diámetro donde cayó el ataque químico. El terreno alrededor estaba quemado
A las 06:30 h las explosiones despertaron a Khaled al-Nasr, elemento de la defensa civil en Siria. Se vistió lo más rápido que pudo y cuando llegó a la escena vio a muchos de sus colegas sufriendo por los efectos del gas.
“No podía respirar. Vi que todo el mundo estaba en el suelo. Había personas retorciéndose en el piso. Algunos tenían espuma que salía de su boca. Empezamos a levantar a las personas”, narra Nasr.

Poco tiempo después de que llegó al lugar de los hechos empezó a sentir una sensación de quemaduras en sus ojos, pero siguió trabajando hasta que ya no pudo continuar. “No podía respirar”, declar.
Los rescatistas desvistieron a las víctimas y las empezaron a rociar con agua. “Inmediatamente, aplicamos agua, luego los sacamos del lugar”, aclaró Nasr.
Las víctimas eran enviadas a hospitales y a instalaciones cercanas a Idlib, incluyendo una posición médica cercana a un centro de operaciones de defensa civil. Un ataque aéreo golpeó dicha posición médica más tarde esa misma mañana, según la defensa civil y el Observatorio.
Algunas víctimas incluso tuvieron que ser enviadas más allá de la frontera con Turquía para su tratamiento.
“Hubo una explosión de un misil, una explosión donde salía mucho humo de ella”, dijo una de las víctimas en un hospital de Turquía.
“Había mucho humo y había cierto olor, era muy difícil respirar”, agregó. Una segunda víctima indicó que cayó al suelo luego que el gas hizo efecto.
Los rescatistas identificaron un cráter de un metro de diámetro donde cayó el ataque químico. El terreno alrededor estaba quemado.
Menem, el doctor en Idlib, indicó que en la clínica donde trabaja había recibido a 68 víctimas, 21 de ellas murieron.
“La mayoría de las víctimas eran niños. Algunos de ellos estaban vivos en la zona del ataque, pero murieron camino al hospital. La mayoría tenían espuma en la boca, estaban agitados y tenían las pupilas constreñidas”, agregó.
“Los tratamos con las medicinas que teníamos a nuestro alcance, la mayoría fue tratada con cortisona”, añadió.

“Todavía estamos recibiendo pacientes. Hoy aceptamos a otras 18 personas, de áreas un poco más lejanas del lugar donde tuvo lugar el ataque, además dos rescatistas tuvieron que ser intervenidos”, concluyó Menem.
El doctor indicó que algunas de las víctimas sufrieron el impacto del ataque hasta 24 horas después.
Con información de Reuters