El papa Francisco, tras encontrarse con varias familias de refugiados ucranianos, inició su visita de dos días a Malta
El papa emprendió, tras encontrarse con varias familias de refugiados ucranianos, su visita de dos días a Malta, donde tiene previsto acudir a la gruta donde la tradición católica indica que naufragó San Pablo, además de visitar un centro de migrantes, pues el tema de la acogida estará muy presente.
Antes de desplazarse al aeropuerto, Francisco se reunió en su residencia de Santa Marta con tres familias de refugiados de Ucrania, procedentes de Leópolis, Ternopil y Kiev y acogidas por la Comunidad de San Egidio, entre las que había nueve menores, uno de ellos sometido recientemente a una operación cardiológica.
El pontífice partió hacia Malta en un avión de la nueva compañía de bandera italiana Ita Airways, tras la desaparición de Alitalia, en el aeropuerto internacional de la esta isla europea.
Malta será el 56 país visitado por Francisco en un viaje que se tenía que haber realizado en 2020, pero que se aplazó por la pandemia, y será el tercer pontífice que lo haga, tras Juan Pablo II en 1990 y 2001, y Benedicto XVI en 2010.
Será, sin duda, un viaje marcado por la guerra en Ucrania y el drama de los ucranianos desplazados, por lo que seguramente habrá referencias sus discursos.
Su primer acto será en el palacio del Gran Maestre en La Valeta con una reunión con al presidente de la República, George Vella, y con el primer ministro, el laborista Roberto Abela, reelegido en las elecciones de la pasada semana.
Después, Francisco dirigirá su primer discurso en el encuentro con las autoridades y el cuerpo diplomático.
Por la tarde se trasladara en ferri a la isla de Gozo, la mayor del país, para visitar el gran santuario de Malta dedicado a la virgen de Ta’ Pinu”.
El domingo visitará la gruta de San Pablo en la basílica dedicada al apóstol en Rabat, construida donde se dice que se refugió naufragar cuando iba preso a Roma, y después, en la plaza de los Graneros, de Floriana, oficiará una misa para unos 10.000 fieles.
Por la tarde y antes de partir hacia Roma, el papa mantendrá un encuentro en el centro para migrantes “Juan XXIII Laboratorio para la Paz” en Hal Far, el antiguo aeropuerto.
Con información de EFE