
Al menos diez muertes han sido relacionadas con la lluvia
Debido a la torrencial lluvia que se registra desde ayer domingo en Carolina del Sur, millones de habitantes de ese estado quedaron confinados en sus casas además de decenas de automovilistas varados lo que obligó a la evacuación de cientos de personas.
Escuelas, centros de trabajo, oficinas gubernamentales y negocios, permanecen cerrados mientras las autoridades enfrentan grandes inundaciones tras la lluvia histórica registrada ayer. El Servicio Meteorológico de los Estados Unidos dio a conocer que la precipitación total que cayó en Columbia fue de 17.17 cm (6,87 pulgadas), rompiendo el récord establecido en 1959.
Hoy la lluvia continúa en Columbia, Myrtle Beach y otras áreas del estado, sumando un total de 26.1 cm (10.44 pulgadas) en dos días.
Al menos diez muertes han sido relacionadas con la lluvia.
“Si estás seguro en donde estás, quédate ahí”, señaló la División de Manejo de Emergencias del estado. “Se espera que continúen las inundaciones en más de la mitad del estado”, añadió.
Varios condados han cerrado carreteras y han establecido toques de queda para asegurarse de que la gente no transite por ellas inundadas.
El alcalde de Columbia, Steve Benjamin, dijo que el servicio de agua atendía algunas zonas de la ciudad ante una nueva alerta de ebullición de agua.
Una firma de seguros calcula que las pérdidas económicas para el Estado deben “superar fácilmente los mil millones de dólares, dada la magnitud de los daños”.
“Por desgracia, como es en el caso de las inundaciones, gran parte de los daños no serán cubiertos por el seguro, ya que solo un pequeño porcentaje de propietarios de viviendas en Carolina del Sur están asegurados en el Programa Nacional de Seguros contra Inundaciones”, agregó.
Por su parte, la gobernadora Nikki Haley señaló el domingo que los socorristas de Carolina del Sur enfrentaban inundaciones que solo se pueden esperar cada mil años.
En Columbia, funcionarios advirtieron que muchos residentes se quedaron sin agua potable debido a interrupciones en el suministro. Recomendaron a los afectados estar preparados para estar sin agua potable durante tres o cuatro días.
Con información de USA Today












