Kim Jong-un visitó en Pionyang a miles de personas que han sido evacuadas desde el norte del país a la capital debido a las inundaciones
El líder norcoreano, Kim Jong-un, visitó en Pionyang a miles de personas que han sido evacuadas desde el norte del país a la capital debido a las inundaciones, informaron medios estatales.
Unas 13 mil personas, principalmente niños, personas mayores, madres o personas con discapacidad física llegaron en tren el jueves a Pionyang procedentes de las provincias de Pyongan del Norte, Jagang y Ryanggang, informó la agencia KCNA.
Kim los visitó en el hostal y el centro de entrenamiento de desfiles militares donde han sido alojados en la capital.
El líder norcoreano se dio un baño de multitudes y KCNA afirmó que Kim “salvó miles de vidas de las inundaciones que han golpeado el noroeste del país y abrió un gigantesco plan de reformas dramáticas para la recuperación de los daños de las inundaciones”.
Durante la visita del jueves, Kim también se refirió “a la firme voluntad del Partido y del Gobierno de convertir el desastre actual en un punto de inflexión para el florecimiento regional”, según KCNA.
El régimen ha hecho un gran hincapié en las labores de recuperación y asistencia tras las inundaciones, especialmente en la ciudad de Sinuiju y el colindante condado de Uiju (noroeste del país), los puntos más afectados por las copiosas lluvias del monzón.
El propio Kim Jong-un ha viajado a la zona en dos ocasiones, una para supervisar las labores de rescate y otra para visitar a los evacuados repartidos en una decena de campamentos de tiendas de campaña que se han levantado en Uiju y Sinuiju.
Además de rechazar ofertas de ayuda humanitaria de China o Rusia, e ignorar abiertamente la de Corea del Sur, Pionyang ha enviado a esa zona a 130.000 trabajadores de la construcción y a unos 300 mil jóvenes voluntarios, muchos de los cuales podrían ser niños, según han denunciado algunas organizaciones humanitarias.
El régimen asegura que nadie ha fallecido debido a las terribles inundaciones, mientras Seúl considera que un número “considerable” de personas podría haber muerto debido al desbordamiento del río Amnok, en la frontera con China.
Con información de EFE