Hunter Biden, hijo del presidente estadounidense, Joe Biden, deberá entregar información sobre sus finanzas en el marco de una disputa de paternidad
Un juez de Arkansas pidió a Hunter Biden, hijo del presidente estadounidense, Joe Biden, que entregue información sobre sus finanzas en el marco de una disputa de paternidad.
Los abogados de la demandante, Lunden Roberts, quieren información de los coches y obras de arte que Hunter Biden posee, además de las inversiones que ha hecho en los últimos cinco años, sus viajes y el objetivo y la financiación de los mismos o del dinero recibido de su padre.
Según medios locales, Hunter Biden deberá responder a las preguntas al respecto. La fecha del juicio ha sido fijada para julio.
Roberts afirmó la semana pasada en la corte que Hunter Biden estaba ignorando las órdenes judiciales que le exigen que presente documentación sobre sus finanzas y había solicitado que la justicia lo declarara en desacato y lo enviara a la cárcel.
El caso se remonta a 2019 y se reactivó en septiembre de 2022, cuando el hijo de Biden pidió una reducción del pago de manutención de la niña, que nació en 2018. Aunque en un primer momento Hunter Biden había alegado que la pequeña no era suya, las pruebas de ADN confirmaron su paternidad.
Los abogados de Hunter Biden aseguran que hasta el momento su cliente ha entregado a Roberts 750.000 dólares, y que su petición de reducir el pago de manutención ha dado a la mujer la oportunidad de exigir información sobre sus finanzas.
Hunter Biden se ha mostrado reacio hasta ahora a facilitar esos datos, de los que también están detrás los legisladores republicanos en el Congreso, que lo investigan por hacer negocios con adversarios del país supuestamente aprovechando sus lazos políticos.
El hijo de Biden ya está siendo investigado además por el Departamento de Justicia por sus impuestos y finanzas.
Esas últimas pesquisas se iniciaron cuando estaba el republicano Donald Trump en la Casa Blanca (2017-2021) y aunque todavía no han resultado en ninguna imputación, los fiscales federales, según la CNN, sopesan un cargo de evasión de impuestos por un delito grave, cargos por un delito menor por no declarar impuestos y un cargo de declaración falsa relacionado con la compra de un arma.
Con información de EFE