
La Candidatura de Unidad Popular (CUP) rechazó apoyar a Artur Mas para un tercer periodo como presidente de la Generalitat catalana
La Candidatura de Unidad Popular (CUP) rechazó apoyar a Artur Mas para un tercer periodo como presidente de la Generalitat catalana, luego de que volvió a intentar conseguir el apoyo este jueves.
Tras un debate iniciado el lunes y extendido hasta el martes, el Parlamento de Cataluña votó en forma negativa por la postulación de Mas, quien obtuvo 62 votos a favor, los de la coalición independentista que representa, Juntos por el sí, cuando necesitaba mayoría absoluta, al menos 68 de 135 en total de la cámara.

Se registraron 73 votos en contra del centro derecha Ciudadanos, Partido Socialista de Cataluña (PSC), Partido Popular (PP), la izquierdista Cataluña sí se puede y los anticapitalistas de la CUP.
El dirigente de la CUP, Antonio Baños, explicó que algunas de las razones de su negativa está en que Mas no ofrece garantías de que en un nuevo periodo se vaya a consolidar el proceso independentista.
Cuestionó los casos de corrupción en los que está envuelta la formación que dirige Mas, Convergencia Democrática de Cataluña, con varias causas judiciales en su contra.

Asimismo, dos diputados de la CUP propusieron el martes a Raúl Romeva, número uno de la lista candidata Juntos por el sí (Mas figuró en el número cuatro), como candidato a la Generalitat, pero éste la rechazó.
Pese a la decisión de la CUP, Baños no descartó que Mas acabe siendo presidente, señalando que “el debate no se acaba esta mañana”.
“Nuestro voto es un no tranquilo con la certeza que el debate no se agota esta mañana”, afirmó el dirigente de la CUP.
Por su parte, Artur Mas aseguró que el acuerdo es posible, pero que este no puede tardar mucho.
“Hay tiempo, pero hay poco; en los próximos días esto tiene que resolverse en un sentido u otro”, consideró, añadiendo que convocar a nuevas elecciones “no es el mejor escenario”.
“La situación actual no ayuda a mantener una posición catalana con la solidez que nos da nuestra mayoría parlamentaria”, concluyó Mas.
Tras no conseguir Mas ser investido, el Parlamento abrirá un proceso de dos meses en los que deberá proponerse un candidato de consenso, debatirse y votarse, y si no prospera volver a convocarse a nuevas elecciones.
El proceso de investidura de Mas es realizado en el momento en que el gobierno español impugnará ante el Tribunal Constitucional la resolución independentista aprobada el lunes por el parlamento catalán.
Con información de Notimex y El País