El explosivo era para atacar a las fuerzas de seguridad, pero se activó con el paso de un vehículo de civiles
Una mina que originalmente había sido puesta para atacar a las fuerzas de seguridad de Afganistán mató a once civiles e hirió a otros 31, en la provincia de Farah.
El explosivo se activó con el paso de un autocar de pasajeros que se dirigía a Kabul, informó el portavoz de la Policía, Muhibullah Muhib. Los cuerpos ya fueron entregados a sus familiares.
El director del centro médico más cercano al que fueron llevados los heridos informó que la mayoría son mujeres y niños con lesiones en la cabeza y fracturas en diversas partes del cuerpo.
Un herido detalló que viajaban por la carretera principal del distrito de Bal Baluk cuando escuchó un gran “bang”, posteriormente despertó en el hospital sin saber de su hija, con la que viajaba.
Con información de AFP