El Gobierno de Joe Biden aprobó directrices más exigentes que las de agosto pasado y que mantenían la tónica de la Administración presidida por Trump
El consumo de combustible de los automóviles que se fabriquen en Estados Unidos en 2025 y 2026 no podrá exceder de los 4.8 litros por cada 100 kilómetros, según las nuevas normas de la Administración Nacional para la Seguridad en la Carretera (NHTSA) anunciadas este viernes.
El Gobierno de Joe Biden aprobó así unas directrices más exigentes que las que presentó en agosto pasado y que mantenían la tónica de la administración anterior presidida por Donald Trump.
El secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, afirmó en un comunicado que los nuevos estándares de consumo harán que el país sea “menos vulnerable a los cambios globales en el precio del petróleo y protegerán las comunidades al reducir las emisiones de carbono en 2.5 millones de toneladas métricas”.
Tras la llegada a la Casa Blanca, Joe Biden ordenó revisar los estándares de combustible de Trump que solo requerían que los vehículos redujesen su consumo una media de un 1.5 por ciento al año.
Con anterioridad, la administración de Barack Obama había establecido unas reducciones anuales de consumo del 5 por ciento.
Con las nuevas normas anunciadas por NHTSA, el consumo de los vehículos producidos en 2023-2024 y 2024-2025 mejorará un 8 por ciento cada año mientras que la reducción ascenderá al 10 por ciento en los de 2025-2026.
Esto significará que un vehículo nuevo en 2025-2026 necesitará un 33 por ciento menos de combustible que uno de 2021.
Con los nuevos estándares, el consumo de combustible de los vehículos en Estados Unidos se reducirá en 757 mil 82 millones de litros de gasolina hasta 2050 en comparación con las antiguas normas.
Con información de EFE