Autoridades ya buscan al animal para evitar que ataque a los habitantes del lugar
Teliece Sander, habitante del condado de Seminole en Florida, caminaba hacia la puerta de su casa con la vista fija en su teléfono cuando se encontró un visitante que la aterrorizó: se trataba de un oso de casi 140 kilogramos de peso.
Rápidamente se apresuró a tomar, sigilosamente, una fotografía del animal para enviársela a su hijo y pedirle ayuda.
Pero su hijo sólo se rió pensando que se trataba de una broma.
Entonces, la aterrada mujer hizo un pequeño video, mientras el oso se acercaba a ella y se lo envió a su hijo quien se encontraba en la casa.
En un punto, la mujer tuvo que dejar de respirar ante el temor de que el oso la atacara. Poco después, el hijo de Teliece salió y tomó a su madre por la espalda y fue sólo entonces cuando el animal se alejó.
Especialistas en comportamiento animal afirman que es muy probable que el oso hubiera sido alimentado por humanos y por eso no se mostró atemorizado ante su presencia. Las autoridades locales esperan encontrarlo pronto y llevarlo a un centro de conservación de especies pues temen que pueda atacar a la población.
Teliece seguramente lo pensará antes de distraerse nuevamente con su teléfono.
Con información de Metro UK.