Minuto a Minuto

Internacional Israel continúa los combates en Yabalia mientras avanza hacia Rafah
En Rafah, el Ejército de Israel aseguró haber matado, en una operación de fuerzas aéreas y terrestres, a un alto cargo de la Yihad Islámica Palestina
Internacional Reyes de España celebran su 20 aniversario de boda con álbum de fotos con sus hijas
Los reyes posaron de manera relajada y vestidos de manera informal en varios lugares de los jardines del Palacio Real de Madrid
Internacional Asaltan la joyería Harry Winston de París y se dan a la fuga con el botín
Esta joyería ya fue objeto de dos asaltos, en 2007 y 2008, en los que fueron robadas 900 joyas con un valor estimado de casi 80 millones de euros
Internacional Agresor del primer ministro eslovaco se declara culpable ante las autoridades
El agresor del primer ministro eslovaco, Robert Fico, se declaró culpable durante un interrogatorio ante la Policía
Deportes Piastri dominó último libre; ‘Checo’ Pérez accidentado en Emilia Romagna
En los libres sufrieron accidentes, sin mayores consecuencias físicas, Fernando Alonso (Aston Martin) y Sergio 'Checo' Pérez (Red Bull)
Démonos una tregua pues
Foto de Unsplash.

Por: Alan Austria

Vivimos tiempos de violencia criminal, pandemia, guerra, discriminación, proteccionismo y polarización.

“Cuando la pradera se incendia, cuando amenaza una inundación o algo en lo recóndito asusta a los animales, las fieras y las alimañas comparten los refugios sin reñir, sin despedazarse entre sí”. Manuel Buendía refirió en su columna la llamada por los campesinos “tregua de Dios”, en la que el periodista pidió que nos demos una tregua: “si ya no somos capaces de actuar racionalmente, dejémonos guiar siquiera por el instinto de los animales”. El reconocido columnista lamentablemente fue asesinado en 1984.

No importa de qué lado estés, es un momento peligroso para tener una opinión. Creo que la mayoría se niega a decir lo que piensa por temor al ostracismo. En lugar de participar en conversaciones potencialmente tensas o incómodas, muchos intentan evitarlas por completo o prefieren conversar con quienes confirmarán sus creencias y opinan sólo después de echar un ojo a quien los escucha para no caldear los ánimos.

O adversamente, expresamos nuestras opiniones a pesar de saber que vendrá un posible y pasional choque de ideas. Amistades e incluso familiares están distanciados o peleados por diferencias en sus opiniones.

Y es que cuando nos relacionamos con personas cuyas opiniones chocan con las nuestras, normalmente tratamos de convencerlas de que abandonen su punto de vista en favor del nuestro. Suponiendo que tenemos razón y ellos están equivocados, luchamos por nuestra perspectiva y tratamos de “ganar”. Muchas respuestas a perspectivas de otros no responden a los argumentos que se presentan, sino que cuestionan el carácter moral de las personas.

Por si fuera poco, vivimos en la era de las benditas redes sociales. En ellas, consumimos información que favorece y endurece nuestras opiniones y solo nos relacionamos con personas cuyas creencias coinciden con las nuestras.

Además, al hecho de que no intercambiemos opiniones se le suma el tsunami de las noticias falsas: ambas se alimentan mutuamente para terminar afectando desde el ambiente en el trabajo, con los amigos y con la familia hasta la democracia, el periodismo y la opinión pública. Una sociedad que funciona bien, requiere diversas opiniones, incluso frente a diferentes puntos de vista, de hecho, especialmente frente a incompatibilidades y desacuerdos.

Seamos más receptivos a escuchar y respetar las posiciones opuestas de los demás. Si descartamos el apasionarnos ante un tema, podemos encontrar creencias comunes en las perspectivas diferentes. Por ejemplo, en un desacuerdo que involucre la pandemia, podríamos decir: “Estoy de acuerdo en que ambos queremos que esta pandemia termine …”.

En la era de la información, cada uno de nosotros tiene el deber de ser humilde y estar más informados. Parte de eso es escuchar a los expertos en diversos temas, incluidos aquellos con los que no estemos de acuerdo. Pero también se trata de escuchar a nuestros amigos, familiares, compañeros de trabajo y vecinos que pueden tener una perspectiva diferente a la nuestra.

Es tiempo de aplaudir a las personas receptivas que saben cómo superar las diferencias con otros discutiendo los temas más difíciles de manera constructiva. La verdad solo se puede encontrar si buscamos primero comprender a los demás.