Vivir en uno de los regímenes más estrictos del mundo no es fácil. Seguir las reglas instauradas por la dictadura, que dictan incluso cómo deben ser los cortes de cabello entre la población, es algo a lo que están acostumbrados los habitantes de Corea del Norte, uno de los sistemas más estrictos y secretos del … Continued
Vivir en uno de los regímenes más estrictos del mundo no es fácil.
Seguir las reglas instauradas por la dictadura, que dictan incluso cómo deben ser los cortes de cabello entre la población, es algo a lo que están acostumbrados los habitantes de Corea del Norte, uno de los sistemas más estrictos y secretos del mundo.
Sin embargo, contrario a lo que se pueda esperar, las personas no viven con miedo al control de Kim Jong-un, sino que se han habituado a seguir las reglas impuestas.
Una estación de autobuses en Pyongyang, donde jóvenes y viejos esperan por el transporte público, contrasta con las lujosas imágenes de las celebraciones por el 70 aniversario de la liberación del régimen colonial japonés.
Los cortes de pelo entre los hombres están regulados por el estado. Solo se permiten 28 estilos de corte de pelo entre los hombres; el cabello no puede ser más largo que 5 cm para los jóvenes y 8 cm para los adultos.
Las compras en la capital son distintas a las de ciudades rurales del país. En la imagen, un hombre en una tienda de estampillas. A pesar de la crisis alimentaria en el país, en la capital se muestra una fachada de riqueza.
A pesar de los rencores hacia occidente, algunos automóviles hechos en esta parte del mundo circulan en Corea del Norte, como parece mostrar esta fotografía de Pyongyang.
Una bandera fue colgada en un poste por las celebraciones del Día de la Liberación en Pyongyang.
Un grupo de trabajadores se relaja bajo un póster propagandístico en Pyongyang.
Las celebraciones por el Día de la Liberación, en que acabaron con el dominio de Japón sobre Corea del Norte.
Con información de Daily Mail