
Patrick Durcan, juez del tribunal de Ennis en el condado de Clare, optó por imponer una sanción económica a la cantante
La cantante irlandesa y vocalista de la banda ‘The Cranberries’, Dolores O’Riordan, fue multada con 6 mil euros por alterar el orden en un avión hace dos años, por escupir y dar un cabezazo a un policía.

La artista de 44 años de edad, también agredió a una de las sobrecargos del vuelo que cubría el trayecto entre Nueva York y el aeropuerto de Shannon en Irlanda, el pasado 10 de noviembre de 2014.
Patrick Durcan, juez del tribunal de Ennis en el condado de Clare, optó por imponer una sanción económica en lugar de una “condena penal”, que hubiese conllevado un castigo más severo.
“En mi opinión, no procedía y no hubiese sido justo criminalizar a la acusada por este caso”, dijo Durcan, quien recordó que O’Riordan no tiene antecedentes penales y, como muestra de su arrepentimiento, ha pedido perdón por escrito a todos los afectados por sus comportamiento y los actos realizados en aquel viaje.
De acuerdo con la orden de juez, la cantante deberá donar el dinero de la multa a una asociación dedicada a la reinserción social de presos,
“Quiero dejar muy claro que se ha tratado a la acusada de la misma manera que a cualquier otra persona”, recalcó el magistrado.
En diciembre pasado, O’Riordan se declaró culpable de cuatro delitos, entre ellos el de agresión y obstrucción de los agentes de la Policía Irlandesa que la detuvieron después del aterrizaje del avión de la aerolínea irlandesa Aer Lingus en el que viajaba.
Durante la detención de la cantante, quien padece de trastorno bipolar, insultó a los agentes y les recordó que es un “icono mundial” y “la reina de Limerick”, la ciudad del suroeste de Irlanda y acusó a uno de los policías en el momento del arresto de manosearla y agredirla sexualmente, una afirmación que retiró después durante el juicio.

El abogado de O’Riordan presentó durante el juicio que en esa época, la cantante sufría episodios de “hipomanía”, privación del sueño y “paranoia”. También en parte de su historial se detalla que la artista, quien reside en Nueva York y es madre de tres hijos de 10, 14 y 18 años respectivamente, se separó de su marido, Don Burton, unos meses antes del episodio que generó que se abriera un juicio.
Redacción