El presidente López Obrador se lanzó contra las calificadoras este lunes, a quienes acusó de actuar “en función de intereses”
El presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió este lunes contra las agencias calificadoras, luego de que la semana pasada Fitch rebajara la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex) de “BB-” hasta “B+” con perspectiva negativa.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador dejó en claro que las calificadoras actúan “en función de intereses”.
“Las calificadoras lo mismo: cuando imperaba la corrupción en Pemex, todas las empresas públicas era muy buena la calificación a Pemex y la CFE, me recuerda también a otra calificadora, por eso es de no tomarse en cuenta la calificadora de los aeropuertos”, argumentó.
Nos dicen, no tiene categoría 1 ¿Y? ¿Y qué pasa?. Son calificadoras que actúan en función de intereses y lo peor de todo es que se les tiene que pagar. Ese es su coraje (porque ya no se les paga), como los expresidentes que ya no tienen pensiones y están enojadísimos, no pasa nada.
El mandatario mexicano dejó en claro este lunes que la deuda de Pemex ha bajado, y calificó el análisis hecho por calificó a Fitch como falso.
“La deuda de Pemex ha bajado y eso lo podemos probar, a ver si nos mandan de Pemex, Octavio (Romero, director de la paraestatal), lo del comportamiento de deuda, de una vez para desmentir a la calificadora esta, para exhibirla como falsaria”, expuso.
Entonces es una burla todo esto de las calificadoras, sin embargo, quedan todavía esos remanentes, esa información que usaban para manipular en las épocas del neoliberalismo. Siguen habiendo los columnistas, expertos, engañando, lo mejor es poder decir en cuanto a economía para nuestro país”, refirió.
La agencia Fitch rebajó la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos de “BB-” hasta “B+” con perspectiva negativa, lo que representa más dificultades financieras para la petrolera más endeudada del mundo.
La calificadora justificó su decisión por el “persistente desempeño operativo débil” que ha resultado en la caída de los puntajes relevantes de los criterios de medioambiente, sociedad y gobernanza (ESG, en inglés) de la empresa del Estado mexicano.
La caída del grado crediticio de Pemex “limitará sus fuentes de financiamiento de bancos, inversionistas y proveedores”, advirtió la agencia.
La rebaja de estos puntajes relevantes refleja el impacto social y ambiental asociado con los múltiples accidentes de Pemex en sus instalaciones desde febrero de 2023, lo que ha resultado en muertos y heridos dentro de sus empleados, y en daños a su infraestructura crucial”, apuntó Fitch en su comunicado.
De hecho, la reducción de la calificación ocurre una semana después de un accidente que dejó dos muertos en una plataforma de Pemex en Campeche, en el sureste del país.
La última vez que una de las grandes calificadoras internacionales disminuyó el grado crediticio de Pemex fue en julio de 2022, cuando Moody’s la rebajó de “Ba3” a “B1” con perspectiva estable días después de bajar la calificación del crédito soberano de México a “Baa2”.
Las calificadoras han coincidido en las dificultades de Pemex para solventar su deuda, que alcanzó los 107.728 millones de dólares en 2022, según su reporte financiero.
Los retos financieros de Pemex ocurren pese a la promesa de López Obrador de “rescatar” a la empresa del Estado, a la que ha ofrecido recursos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La empresa reportó una ganancia neta de mil 187 millones de dólares en todo 2022, un resultado positivo que rompió con 9 años consecutivos de pérdidas.
Con información de López-Dóriga Digital