Los ticos se fueron al descanso con la victoria por dos goles pero la selección empató con los goles de Giovani y Chicharito
En partido amistoso de preparación para la Copa Oro 2015, la Selección Mexicana empató 2-2 ante su similar de Costa Rica, en partido disputado en el Citrus Bowl de Orlando, Florida.
Desde muy temprano el encuentro se puso cuesta arriba para la selección, pues los ticos se adelantaron apenas al minuto 4, luego de que un error en la marcación de Diego Reyes dejó solo en el área a David Ramírez, quien disparó con potencia por entre las piernas del arquero Guillermo Ochoa.
La escuadra dirigida por Miguel Herrera, ahora sí conformada por elementos de clubes europeos, no ha podido crear mucho peligro en el área de la selección de Costa Rica, a pesar de mostrar su intención ofensiva con una formación de tres delanteros. Por su parte, los ticos no se relajaron tras el gol y continuaron el asedio sobre el marco defendido por Ochoa, con disparos lejanos y aproximaciones por las bandas. Eventualmente, Costa Rica encontró el premio a su insistencia, cuando un servicio por el costado cruzó el área mexicana y el lateral de la Selección Mexicana y del Watford inglés, Miguel Layún, empujó sin querer al fondo de la red, colocando el 0-2 por la vía del autogol.
¡Autogol de Miguel Layún! México pierde 2-0 (min. 36) ante Costa Rica, en amistoso. #Tri pic.twitter.com/sOIShaMF5s — Hoy Deportes (@hoydeportes_USA) June 27, 2015
Antes del medio tiempo, México tuvo un par de llegadas, pero el arquero Esteban Alvarado se mostró bien plantado bajo los tres postes.
Sin embargo, para el complemento Miguel Herrera cambió su dibujo táctico y de inmediato se reflejó en el marcador, pues Giovani dos Santos acercó a la selección con un gran remate cruzado de pierna derecha.
Y unos minutos después, al 55, Javier “Chicharito” Hernández igualó los cartones al rematar con gran técnica de cabeza un centro enviado por derecha.
Luego del impetuoso arranque de México, las acciones se fueron nivelando, y hubo pocas jugadas de peligro en el resto del segundo tiempo.
Los cambios realizados por los entrenadores en la segunda mitad fueron descomponiendo a las escuadras y desapareciendo el ritmo del encuentro, por lo que el marcador no volvió a moverse.