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Unesco critica sexismo en asistentes virtuales
Cortana en Halo. Foto de Microsoft

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco por sus siglas en inglés), criticó que los asistentes virtuales sean una representación del sexismo que domina el mundo.

Saniye Gulser Corat, directora de la División para la Igualdad de Género, relata que la falta de diversidad dentro de la industria tecnológica -dado que solo el 12 por ciento en la investigación de inteligencia artificial y el seis por ciento dentro del desarrollo de software son mujeres-, deriva en la creación de “máquinas obedientes y complacientes que pretenden ser mujeres”.

Unesco critica sexismo en asistentes virtuales - asistentes-virtuales
Asistentes virtuales. Foto de Marketing Directo

Amazon nombró ‘Alexa‘ a su asistente por la biblioteca de Alejandría en Egipto. Microsoft adoptó a ‘Cortana‘ del videojuego Halo, donde la inteligencia artificial aparece como una mujer atractiva desnuda. Apple eligió ‘Siri‘ por ser un nombre nórdico que significa “mujer hermosa que te conduce a la victoria”.

Google es el único en tener un asistente genérico, al menos en cuanto a su nombre, pues es simplemente ‘Home‘, sin embargo, su voz es femenina.

En su informe ‘Me sonrojaría si pudiera‘, la Unesco invita a la reflexión sobre las “respuestas desviadoras, mediocres o apologéticas” que las asistentes virtuales dan ante los insultos.

Ejemplo de ello es que ante la expresión “¡Qué sexy eres!”, Siri respondía con un “Gracias por decírmelo”, aunque la contestación fue cambiada por un “No sé qué responder a eso”.

Se establece que las personalidades humanizadas como mujeres de los aparatos tecnológicos están dejando una marca en la sociedad al punto de poder influenciar las interacciones con féminas reales.

“Entre la cultura más le enseñe a la gente a equiparar a las mujeres con asistentes, las mujeres reales más serán vistas como asistentes y sancionadas por no comportarse como tales”, advierte.

Ante ello, la Unesco exhortó a las compañías tecnológicas y a los gobiernos a dejar de hacer femeninos a los asistentes virtuales y optar por una personalidad y voz neutral.

Con información de The New York Times