Colectivamente, la fortuna de las personas más ricas del mundo creció en 762 mil millones de dólares en 2017
Un estudio publicado el domingo por Oxfam, confederación internacional cuyo objetivo es combatir la pobreza, señala que el 82 por ciento de la riqueza generada a nivel global en 2017 fue solo para el 1 por ciento de la población.
El organismo, al que pertenecen distintos líderes políticos y empresariales, incluido el presidente Trump, difundió este análisis previo a la reunión anual del Foro Económico Mundial, que se llevará a cabo en Davos, Suiza, en el que la desigualdad de ingresos será un tema importante.
“Hay un boom multimillonario”, dijo Paul O’Brien, vicepresidente de políticas y campañas de Oxfam America. “Una tormenta perfecta está impulsando el poder de negociación de los que se encuentran en la cima mientras se reduce el poder de negociación de los que están abajo. Si tal desigualdad sigue sin resolverse, atrapará a la gente en la pobreza y fracturará aún más a nuestra sociedad “.
En la actualidad hay 2 mil 43 multimillonarios en todo el mundo, según el informe, “Recompense el trabajo, no la riqueza”.
De cada 10 multimillonarios, nueve son hombres. Colectivamente, su fortuna creció en 762 mil millones de dólares en 2017, mientras que la mitad más pobre de la humanidad no vio ningún aumento en su riqueza en absoluto.
El estudio se fundamentó en datos e investigaciones compiladas por el banco suizo Credit Suisse, el Banco Mundial, la lista de multimillonarios de Forbes, el Fondo Monetario Internacional y otras fuentes.
Informes anteriores de Oxfam han demostrado que el 1 por ciento más rico del mundo posee más riqueza que el resto de la población mundial combinada, una tendencia que se reafirma en la última edición.
También mostró que 42 personas en 2017 tenían una riqueza equivalente a los tres mil 700 millones de personas más pobres del mundo.
El fundador y filántropo de Microsoft, Bill Gates, Jeff Bezos de Amazon y el legendario inversor Warren Buffett son los tres estadounidenses cuya riqueza combinada es la de los 160 millones de estadounidenses más pobres: alrededor de 250 mil millones de dólares.
Oxfam dijo que la desigualdad masiva está siendo impulsada por factores que incluyen retornos financieros excesivos para los propietarios de las empresas y los accionistas a expensas de los trabajadores comunes y el resto de la economía.
Además, se encuentra la capacidad de las personas y corporaciones ricas para usar los paraísos fiscales que les permiten evadir o proteger miles de millones de dólares de las autoridades.
Otro factor es la política pública que permite condiciones de mercado que presionan a la baja los salarios e infringen los derechos laborales.
En los próximos 20 años, según el informe, 500 de las personas más ricas del mundo otorgarán 2.4 billones a sus herederos, una suma mayor que el Producto Interno Bruto de India, país que tiene más de mil 300 millones de habitantes.
“La desigualdad está llegando a niveles tan extremos que en realidad podría ser malo para las personas realmente ricas porque está frenando el crecimiento económico y llevando a una desorganización política”, dijo David Hulme, un experto en desarrollo global de la Universidad de Manchester.
Hulme agregó que “a nivel mundial, en los siete mil 600 millones de personas del mundo, la pobreza extrema en realidad está reduciéndose. Solo cuando observas al grupo principal, las personas más ricas, esa riqueza se concentra increíblemente. Ambas cosas pueden suceder al mismo tiempo “.
De hecho, entre 1990 y 2010, la cantidad de personas que vivía en la pobreza extrema (definida como menos de 1.90 dólares por día) se redujo a la mitad y continuó disminuyendo, dijo Oxfam.
El World Inequality Report 2018, un informe separado publicado en diciembre del año pasado, señaló que la desigualdad de ingresos varía mucho en todo el mundo.
Cuando se define como la participación del ingreso nacional total que corresponde al 10 por ciento de los mayores ingresos de un país, es la más baja en Europa (37 por ciento) y la más alta en Medio Oriente (61 por ciento).
El Instituto de Estudios Políticos, un grupo de expertos, advirtió en noviembre que las reformas impositivas del presidente Trump “exacerbarían las disparidades de riqueza existentes”.
Trump redujo el impuesto a las corporaciones estadounidenses del 35 por ciento al 21 por ciento. La Casa Blanca argumentó que la medida evitará que las empresas estadounidenses reubiquen sus operaciones en el extranjero y les permitirá contratar a más trabajadores.
Con información de USA Today
Minuto a minuto
