
Aubrey Dunn, candidato al Senado por los Estados Unidos y administrador de tierras, colocó carteles a lo largo de kilómetro y medio con la frontera con México para exigir pago por el uso de dicha propiedad
Aubrey Dunn, candidato al Senado por los Estados Unidos y administrador de tierras de Nuevo México, colocó letreros a lo largo de kilómetro y medio de la frontera con México, con el objetivo de bloquear las operaciones de la Patrulla Fronteriza, ya que no compensa al estado por el uso de dicha tierra.
Dunn asegura que si su oficina no llega a un acuerdo de uso de dichas tierras estatales con el gobierno estadounidense, colocará una reja para bloquear el acceso a la propiedad.
En febrero, Dunn envió una carta a funcionarios del gobierno federal en donde aseveró que el uso de dichas tierras en Nuevo México es una cuestión de soberanía estatal, además de que el uso de dicha propiedad ayudará a financiar la educación pública en dicha región de los Estados Unidos.

“Suspenderé al gobierno federal tal como lo haría con cualquier negocio que invada las tierras estatales. La seguridad fronteriza es importante, pero también lo son nuestros hijos y tienen el derecho a recolectar el dinero ganado de las tierras que poseen”, aseveró Dunn.
En respuesta, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos informó que evalúa las peticiones de Dunn, y señaló en una declaración que parte de la estrategia para vigilar la frontera con México incluye concretar uniones entre el gobierno federal y las localidades.
No existen reportes este martes de que las operaciones de la Patrulla Fronteriza se suspendieran, tras los carteles colocados por Dunn.
La oficina de Dunn aseveró que existe un terreno entre Santa Teresa, Nuevo México y El Paso, Texas, que había sido inicialmente de Nuevo México según la Ley Ferguson que data de 1898. En dicho tramo se asegura que nunca fue parte de una zona neutral esta establecida por decreto presidencial en 1907 para garantizar que las autoridades federales puedan patrullar a lo largo de la frontera.
Dejan en claro que expedientes de la Oficina de Tierras del Estado de Nuevo México y otros archivos detallan que el estado de la Unión Americana es propietaria de dicho terreno, por lo que el gobierno de los Estados Unidos jamás tuvo permiso estatal para construir la barrera fronteriza ni para usar dichos caminos.
Con información de AP