
Economistas explican que resulta prácticamente imposible detectar qué remesas son ilegales
Donald Trump sigue con su campaña racista. Esta vez declaró que de llegar a la presidencia, una de las medidas que implementaría sería un bloqueo de los envíos de remesas que los inmigrantes mexicanos envían a territorio nacional desde Estados Unidos.
Dicha medida forzaría al gobierno mexicano a que pague un muro fronterizo de unos 10 mil millones de dólares (17 millones 4378 mil 828 de pesos), según el aspirante republicano.

Durante 2015, los envíos de remesas alcanzaron los 24 mil 771 millones de dólares, según el Banco de México, lo que representa la fuente más estable de ingresos para México, por encima del petróleo y el turismo.
Sin embargo, expertos consideran inviable el bloqueo. “No tiene ninguna viabilidad económica ni financiera. No puedes saber quiénes envían las remesas, ni si son legales o no, porque las transferencias son básicamente anónimas. Tendría que cambiar tantas leyes que es prácticamente inviable” señala el economista e investigador de El Colegio de México, Gerardo Esquivel.
“Suena descabellado regular eso. El resultado político sería contraproducente: México siempre ha sido sumiso con Estados Unidos, pero esto, en vez de presionarlo, sí lo encendería” apunta José Antonio Romero Tellaeche, también economista de la misma institución.
Redacción