En México, se estima que hay unos 28 millones de perros y gatos, de los cuales, 70% se encuentran en la calle
En México, se estima que hay unos 28 millones de perros y gatos, de los cuales, 70% se encuentran en la calle, y esa cifra aumenta cada año un 20% más, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Los número son exhorbitantes, hay millones de perros abandonados y maltratados y queremos darles una mejor calidad de vida”, afirma Enrique Arreguín, médico veterinario de la Fundación Antonio Haghenbeck y de la Lama IAP.
Esta organización impulsa programas sustentables para beneficio de perros y gatos con el objetivo de resolver problemáticas como la sobrepoblación felina y canina, el maltrato y abandono animal y la falta de derechos de los animales.
“Es un grano de arena muy pequeñito, pero trabajamos diferentes ejes, como una unidad de servicios de emergencia animal, un centro de adopciones y campañas de esterilización gratuitas”, enumeró Arreguín.
Esta fundación tiene más de 35 años trabajando y es una de las primeras que volteó a ver esta problemática en el país. De 1996 a la fecha, ha realizado 427,000 cirugías gratuitas de esterilización a perros y gatos, principalmente en la Ciudad de México.
Anteriormente era impensable que el perro tuviera derechos u oportunidades, porque se veía como un mueble, un objeto o un juguete, y hoy sí ha cambiado la conciencias de muchas personas; sin embargo, falta mucho”, señaló.
“Siguen siendo individuos ignorados por la sociedad, seguimos viendo temas de maltrato, perros atropellados, perros que tiene varios años en una casa y que van y los botan a la calle cuando ya no los quieren, o perritos que no están esterilizados y andan dejando su descendencia por todos lados”.
Este egresado de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México se integró a esta fundación cuando terminó sus estudios, debido a que vivía de cerca esta problemática.
Viví muchos años en colonias donde los perros estaban en las calles, eran maltratados, y por eso me sumé a esta iniciativa”, recordó.
Arreguín dijo que en la Ciudad de México todavía hay zonas en las que los perros padecen altos índices de abandono, como Tláhuac, Venustiano Carranza, Tlalpan e Iztacalco.
Un perro para el alma
Otra asociación que también trabaja con animales, pero con el fin de ayudar a las personas, es Fundación ACUMI
Esta organización se dedica a seleccionar y capacitar a perros rescatados con el fin de convertirlos en perros de apoyo emocional para personas con discapacidad o que viven alguna vulnerabilidad, explica Deborah Lazard, directora de Fundación ACUMI.
Ellos no rescatan perros, sino que trabajan con organizaciones que se dedican a eso para seleccionar, a través de un especialista en conducta animal, a aquellos que cumplan con las características emocionales necesarias.
Los perros son seleccionados por tener un temperamento estable y ecuánime, a mí me gusta decir que son ‘perritos zen’”, apuntó Lazard.
Los perros elegidos pasan por un periodo de seis a ocho meses en el que se trabaja con ellos con algunos comandos básicos y se les estimula con reflejos positivos para así lograr que tengan un mayor apego al ser humano.
“No es un entrenamiento, sino una capacitación y rehabilitación emocional”, aclara Lazard. “Y con esto se vuelven perros muy allegados al ser humano”.
Estos perros han sido adoptados por familias que, por ejemplo, tienen algún miembro con autismo o demencia senil, así como por individuos que viven un duelo o divorcio, además de personas de la tercera edad, entre otros.
“Los perros de apoyo emocional, por el proceso de selección y capacitación, tienen la capacidad de proporcionar beneficios terapéuticos a las personas a través de generar vínculos afectivos estrechos que ayudan a mejorar la dinámica familiar, disminuir el estrés y la ansiedad y fortalecer al individuo para afrontar alguna situación difícil”, reiteró Lazard.
Un perro adoptado que no pasa por este proceso de capacitación corre el riesgo de tener poco equilibrio emocional, lo cual, en vez de beneficiar, podría provocar más problemas a personas que viven algún tipo de vulnerabilidad.
Sin embargo, Lazard destaca que los perros rescatados no son malos, y los que capacitan en Fundación ACUMI tienen aptitudes especiales.
Adopciones en el Parque Hundido este fin de semana
Ambas asociaciones están ahora trabajando en conjunto con la marca Cheetos, la cual lanzó una edición especial cuyas ventas se convertirán en donativos.
Arreguín y Lazars explicaron que estos donativos servirán para temas como fortalecer los programas de estas y otras fundaciones, mejorar sus instalaciones, capacitar a su personal, hacer llegar la ayuda a más perros y gatos y extender su labor a otros estados del País, además de generar conciencia en las personas.
Asimismo, estas fundaciones participarán el sábado 2 y domingo 3 de marzo en el “Pabellón Huellitas”, en el Parque Hundido de la Ciudad de México, en el que el público en general podrá adoptar perros y gatos sin hogar y obtener información para generar conciencia sobre la situación de estos animales.
De las 10:00 a las 18:00 horas, habrá diversas actividades para orientar a las personas a tener una adopción responsable y comprometida. Todo de manera gratuita.
La página web de Fundación Antonio Haghenbeck y de la Lama IAP es cambiaundestino.org, mientras que la de la Fundación ACUMI es acumi.org.mx.
Con información de Carlos Tomasini
Minuto a minuto
