
La piratería ha llegado a niveles insospechables en el mundo y tanto en México como en otros países los riesgos de utilizar productos o artículos que no pasan por un control de calidad pueden afectar a la salud de las personas que los compran, bien reza el dicho “lo barato sale caro”. En este caso, … Continued
La piratería ha llegado a niveles insospechables en el mundo y tanto en México como en otros países los riesgos de utilizar productos o artículos que no pasan por un control de calidad pueden afectar a la salud de las personas que los compran, bien reza el dicho “lo barato sale caro”.

En este caso, los lentes que venden en mercados sobre ruedas, puestos de calle o en espacios donde no dan garantía, no solo no protegen la vista, sino que pueden aumentar el daño en los ojos, así lo advirtió el Consejo Argentino de Oftalmología.
Los anteojos oscuros crean un efecto de cámara oscura que dilata la pupila, y al carecer de filtros para rayos ultravioleta (UV), terminan haciendo que la vista se vea más afectada por la radiación.
Para comprender este efecto, se puede “dar forma de tazas a ambas manos y colocarlas sobre los ojos”, explicó el oftalmólogo Ernesto Ferrer, expresidente y asesor del Comité Ejecutivo del Consejo Argentino de Oftalmología.
“Los rayos ultravioleta afectan la piel y lógicamente los ojos, produciendo desde una irritación pasajera a tumores malignos (…) en el ojo esta radiación afecta la conjuntiva, produciendo irritación y tumores, la córnea, el cristalino y hasta la retina”, señaló Ferrer.
El oftalmólogo dijo que se debe tener en cuenta la coloración del lente, ya que no son iguales los lentes de sol para nieve que las que se usan para la arena porque la radiación es diferente.

“No es lo mismo la radiación a nivel del mar que los 5 mil metros de altitud, y además observa mayor concentración a medida que nos acercamos al Ecuador”, indicó Ferrer.
El especialista visual dijo que aunque los lentes de sol no tengan aumento se deben de adquirir en ópticas especializadas.
“Los anteojos de sol aunque no tengan aumento, deben ser adquiridos en una óptica porque están hechos especialmente con los filtros de rayos UV adecuados”, puntualizó.
Para que los lentes protejan contra los tipos más dañinos de radiación ultravioleta, “los lentes deben tener constancias protección UVB, UVC, entre 239-320 nanómetros”, indicó el especialista.

Un nanómetro (nm) es la millonésima parte de un milímetro.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, pequeñas cantidades de UV son esenciales para la producción de vitamina D, pero la exposición no adecuada puede resultar en problemas crónicos, incluyendo cáncer, que afecta la piel, los ojos y el sistema inmunológico.
Redacción