#LaPeorMamá. Ya no vamos a ser mejores amigas

Uno de mis momentos favoritos del día es cuando recojo a mis hijos de la escuela, ese momento en que comienzan a contarme su día, lo que hicieron y los chismes de sus compañeros y las maestras.

Normalmente salen contentos y cansados pero hay ocasiones en que nada más verlos me doy cuenta de que algo no va bien.
– ¿Estás enojada? – Le pregunté a #miniplausi, pues vi que traía tremenda cara saliendo de la escuela.
– Sí, estoy enojada. Pero sobre todo, estoy triste.
Esperé un momento a que se decidiera a contarme.
– Es que me pasó algo horrible en la escuela. – Intenté no escandalizarme pues a veces tendemos a exagerar un poquito eso de las cosas horribles que nos pasan. – F. me dijo que ya no vamos a cumplir 6 meses de ser mejores amigas.

Sí, mi hija y su mejor amiga festejan sus “amiversario”.

– ¿Y eso? ¿Pasó algo?
– Es que en clase de computación me senté con A. porque estaba sola y a mí no me gusta que mis amigas estén solas y F. me dijo que me sentara con ella, pero, te juro mamá que no escuché cuando me dijo. Cuando llegamos al salón F. me mandó un papelito donde me decía que ya no íbamos a cumplir 6 meses de mejores amigas y yo le regresé el papelito preguntándole “¿por qué?”, y ella me contestó: Deberías saberlo. Y pues yo le dije que no sabía. Me puso que porque me había sentado con A. en computación y la había dejado sola, que eso no era de mejores amigas. Así que yo le dije, mami, que yo tengo derecho a tener más amigas, que ella es mi mejor amiga pero que tengo más y que también me gusta estar con ellas. Y, ¿sabes que me puso, mami?
– ¿Qué te puso?
– Me puso “traicionera”.

En eso que se suelta llorando. De verdad vi en sus ojitos el dolor que le causó F. Por dentro quería decirle el famoso “pues ella se lo pierde”, pero me contuve.
– Y entonces, ¿qué hiciste?
– Pues me puse a llorar porque lastimó mi corazón. Y en eso que me ve la miss y me preguntó qué me pasaba y le conté lo que había pasado. Entonces la miss le llamó a F. para regañarla, yo no quería que la regañaran, mamá, pero sí sentí muy feo.
– Y, ¿qué les dijo la miss?
– Le dijo a F. lo que yo le dije, que todos podemos tener más de un amigo y que eso no quiere decir que seamos traicioneros y que esa es una palabra muy fuerte, que no se vale que se la esté diciendo a sus compañeros. Y nos dijo que habláramos en el recreo. Pero no quiso hablar conmigo. Creo que ya me quedé sin amiga, mami.
Todo esto me lo contaba entre sollozos y mocos. Cuando el llanto paró un poco le pregunté:
– ¿Qué quieres hacer al respecto?
– Pues no sé. La verdad que tengo más amigos. Pero a F. la quiero mucho.
– Y, ¿no crees que puedas hablar con ella mañana que ya las dos van a estar más tranquilas?
O tal vez le puedas escribir una carta.
– Puede ser. Lo voy a intentar. Yo creo que ella sí va a entender y respetar que tenga más amigos porque es muy inteligente.

Total entre una gripa y un fin de semana, pasaron varios días en los que #miniplausi y F. no se vieron. Yo sufría por ver a mi hija triste pero confié en que lo arreglaría de alguna manera.

Siguiente lunes.
– Mira mamá. – Me muestra una cadena con medio corazón que decía “friends” (amigas) – F. se quedó con el de “best” (mejores) y yo con el de friends. Yo creo que ya nos arreglamos.

Y así terminó una de las tantas historias que mi hija vivirá en drama total con sus amigas. Sí, en drama total porque yo las viví igual y ya se sabe que físicamente no se parece nada a mí, pero ¡ah qué carácter tan parecido tenemos!.

Gracias por leer
#LaPeorMamá