Que nunca tengamos que pensar en qué foto utilizaran nuestros familiares o amigos para buscarnos
Somos mujeres, somos hermosas, somos bonitas, somos coquetas y nos gusta tomarnos fotos sintiéndonos cómodas como nos vemos.
Las mujeres en México y en todas partes del mundo lo hacemos libremente, y aún más en las redes sociales. ¿A quién no le gusta salir bien en una foto?
Razones profundas, puede haber muchas, que si para recibir likes, que si para que el que nos gusta nos vea o porque simplemente nos sentimos bien.
Lo que nunca imaginamos es que una de esas fotos la utilicen para buscarnos, para colocarnos a la vista de desconocidos con el aviso de SE BUSCA.
Tampoco pensamos siquiera en que alguna de nuestras fotografías pueda usarse para el día de nuestra muerte, y ni mucho menos para buscarnos, porque alguien pudo secuestrarnos, violarnos o matarnos.
Por más que suene dramático, en estos últimos años, nuestro país se ha convertido en un lugar donde todas las mujeres corremos peligro sin importar horario, lugar o compañía. Ya no hay piedad si matan o levantan frente a sus hijos o familiares.
Según la información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, van más de 12,897 mujeres asesinadas de diciembre del 2018 a abril del presente año.
La imagen que toma Joebeth Terriquez de la agencia EFE en Tijuana, me dolió y me llenó de angustia. Ella se llama Jessica Janeth Durán Cervantes, y es una de las tantas niñas que han desaparecido en el estado de Baja California.
Tijuana se ha vuelto la región del país en las que más niñas entre 12 y 17 años desaparecen. Estado de México y Guanajuato quienes tienen más mujeres asesinadas.
En Puebla, recién asesinaron a balazos a la abogada y activista Cecilia Monzón. En Guerrero han sido asesinadas más de 60 mujeres en tan solo seis meses, y por solo mencionar, este fin de semana fueron seis más.
En Sinaloa han aumentado los feminicidios. En Nuevo León se hacen los que “hacen” y no hacen nada, allí los últimos casos de Debanhi Escobar y Yolanda Martínez. En Veracruz, Ciudad de México, Oaxaca, Chiapas, Michoacán, Chihuahua, Aguascalientes, Coahuila y Tabasco pasa lo mismo, hay casos y más casos.
En promedio se matan a 10 mujeres al día en nuestro país, y se ha rebasado el registro de 100 mil personas desaparecidas y no localizadas.
Cien mil fotografías que han circulado frente a nosotros y quizá ni los hemos visto; la misma cantidad de imágenes que se suben cada dos minutos en Instagram.
Siempre se ha dicho la frase que “una fotografía te roba el alma”, yo diría que no la roba, la congela y al menos así, todos y todas aquellas que ya no están, encuentran un espacio para permanecer en la memoria de los suyos y de desconocidos como nosotros, que las alcanzamos a ver, cuando ya no están.
Que nunca tengamos que pensar en qué foto utilizaran nuestros familiares o amigos para buscarnos. Que nunca más desaparezcan niñas, adolescentes y mujeres, pero ojalá que sí aparezca alguien con el mando e interés suficiente por erradicar los feminicidios, secuestros y asesinatos.
