
Foto de Internet
José Fonseca dijo que la presencia de Agustín Carstens transmitía tranquilidad y es un dilema elegir a un sustituto
diciembre 1, 2016
José Fonseca, dentro de su columna Café Político, habló sobre la renuncia de Agustín Carstens como gobernador del Banco de México (Banxico).
Como si no hubiera suficiente nerviosismo por las medidas que podría tomar Donald Trump durante su presidencia, ahora se suma esta noticia.

Es una realidad que Carstens goza de prestigio internacional. La prueba es que se va para ocupar la gerencia del Banco de Pagos Internacionales, una institución de las más antiguas del mundo.
La separación plantea el dilema de quién lo reemplazará. La percepción es que la presencia de Carstens daba tranquilidad.
Ahora tienen poca tranquilidad los que reclaman al gobierno de Peña Nieto por no tener actitudes más agresivas hacia Trump. No olvidemos que la agresividad es un desahogo y en las relaciones internacionales es improductiva.
Quizá sea preferible la sensatez que aconseja a México el millonario Michael Bloomberg, exalcalde de Nueva York: “en las negociaciones se debe ser firme pero también civilizado porque siempre habrá que volver a negociar alguna otra cosa”…
Redacción