
UAW dijo que la imposición de aranceles ayudará a recuperar “miles” de empleos tras la caída de 2 millones de unidades en la producción
El sindicato del sector del automóvil de EE.UU., United Auto Workers (UAW), aplaudió este miércoles la decisión de la Administración de Donald Trump de imponer aranceles del 25% a la importación de automóviles y dijo que supone el fin del “desastre del libre comercio”.
Leer también: El primer ministro canadiense califica los aranceles al automóvil como un “ataque directo”
El presidente del sindicato, Shawn Fain, declaró en un comunicado su satisfacción con la medida, anunciada este miércoles por Trump y dijo que “finaliza el desastre del libre comercio que ha devastado las comunidades de la clase trabajadora durante décadas”.
“Terminar con la carrera a la baja en la industria del automóvil comienza por arreglar nuestros acuerdos comerciales rotos, y la Administración de Trump ha hecho historia con las acciones anunciadas hoy”, añadió Fain.
El sindicalista, que durante la pasada campaña presidencial en EE.UU. alineó al poderoso sindicato con el rival de Trump, Joe Biden, justificó su apoyo al presidente republicano porque el objetivo es positivo para los trabajadores.
“Desde el sindicato lo hemos dejado claro: colaboraremos con cualquier político, sin importar su partido, que esté dispuesto a revertir décadas de retroceso para la clase trabajadora en los tiempos más rentables de la historia de nuestro país”, explicó.
“Estos aranceles son un gran paso en la dirección correcta para los trabajadores del automóvil y las comunidades obreras de todo Estados Unidos”, añadió.
UAW dijo que los aranceles permitirán recuperar “miles” de empleos en el país y que en la última década la producción nacional se ha reducido en 2 millones de unidades, al mismo tiempo que en EE.UU. se venden millones de automóviles producidos en el extranjero.
UAW terminó solicitando la “inmediata” renegociación del T-MEC “que no ha hecho más que perpetuar los efectos dañinos del TLCAN (el original acuerdo de libre comercio entre México, EE.UU. y Canadá) al aumentar el déficit comercial con México y permitir que las empresas trasladen empleos de EE.UU.”.
Con información de EFE.