
El papa Francisco escribió en el libro “La Alegría del Amor” sobre la aceptación de personas divorciadas y vueltas a casar
La exhortación para que la Iglesia Católica terminara la excomunión de divorciados y vueltos a casar, así como la discriminación contra los homosexuales, vino del propio papa Francisco, a través de un documento publicado en El Vaticano.
El papa Francisco publicó una exhortación apostólica titulada “Amoris Laetitia”, o la Alegría del Amor en español, donde solicita a la Iglesia Católica adaptarse a la nueva realidad mundial.

A través de nueve capítulos, el Sumo Pontífice solicita a la Iglesia no tratar como excomulgados a las personas que decidieron divorciarse o a las que volvieron a contraer matrimonio con otra persona.
Actualmente, las personas deben de eliminar su matrimonio anterior ante el Estado y la Iglesia, para poder volver a comulgar.
“Los divorciados que celebran una nueva unión, por ejemplo, pueden encontrarse en varias situaciones, las cuales no deberían ser encasilladas o colocadas en clasificación rígidas, sin dejar espacio para un criterio más conveniente de manera personal y pastoral”.

Reiteró que el divorcio sigue siendo “el diablo”, por lo que urgió a los sacerdotes para fortalecer los matrimonios existentes, y dar comprehensión en situaciones excepcionales.
Asimismo, llamó a los sacerdotes para terminar la “injusta discriminación” contra los homosexuales, pero reiteró su rechazo a los matrimonios de personas del mismo sexo.
“No existe base para considerar las uniones homosexuales de ninguna manera ni remotamente similar al plan de Dios para el matrimonio y la familia”, dice el documento.

De acuerdo al papa Francisco, estas solicitudes están guiadas por un deseo de Jesús para que la Iglesia sea cada vez más atenta y menos dura contra las personas.
“Entiendo a aquellos que prefieren un trato pastoral más rígido sin dejar lugar a la confusión, pero sinceramente creo que Jesús quiere una Iglesia que considere la bondad”, escribió.
Aseguró que este trato rígido no ha ayudado nada a la Iglesia, por lo que se requiere quitar todos los juicios de valor que se tienen contra varias condiciones actuales.
Con información de NBC