A partir de esta semana se prohíbe el uso de unicel en Nueva York y se suma a la medida que también establecieron ciudades como París
A partir de esta semana se prohíbe el uso de unicel en Nueva York y se suma a la medida que también establecieron ciudades como París, Toronto, Washington D.C., San Francisco o Seattle.
El unicel, también conocido como poliestireno afecta los ecosistemas marinos. Douglas McCauley, profesor de Biología Marina de la Universidad de California, explica: “con mucha frecuencia encontramos unicel en los intestinos (de animales marinos) que pueden ser letales”.
Según este biólogo marino, los pedazos de unicel en el mar pueden absorber contaminantes peligrosos que hay en el mar, pedazos que llegan a ser digeridos por animales como una tortuga. También puede afectar a los seres humanos.
“Es muy preocupante que algunos de estos peces que se alimentan de plásticos acaben en nuestros platos” dijo McCauley.
El unicel no se puede reciclar a gran escala porque todavía no hay un método efectivo. Hasta el momento, la única solución es quemarlo para producir calor que se use como energía. Sin embargo, transportar este material es costoso.
Con información de La Nación